El Consejo Asesor de expertos en enfermedades infecciosas y salud pública asesorará al Departamento de Salud a la hora de actuar contra las enfermedades como el virus ZIKA
El Departamento de Salud del Gobierno Vasco reunió a expertos y expertas de epidemiología, microbiología, enfermedades infecciosas, salud pública y medicina preventiva para constituir el Consejo Asesor de enfermerdades infecciosas emergentes de Euskadi.
El Departamento de Salud tiene como objetivo prioritario el control de las enfermedades infecciosas transmisibles y de ahí que la Directora de Salud Pública y Adicciones, Dra. Miren Dorronsoro, haya señalado esta mañana al comienzo del encuentro que “la vigilancia epidemiológica, la detección y diagnóstico de casos sospechosos y las intervenciones para cortar la cadena de transmisión son imprescindibles para garantizar que dichas enfermedades se controlen y no se diseminen entre la población vasca”
Así, los objetivos de este nuevo Consejo Asesor que lo componen 15 profesionales serán, principalmente:
1. Establecer los mecanismos para detectar de forma rápida un eventual caso sospechoso de virus Zika u otras enfermedades infecciosas emergentes en cualquier nivel del sistema sanitario de la CAPV.
2. Asegurar un rápido diagnóstico y una adecuada asistencia sanitaria de los casos sospechosos y/o confirmados de enfermedades infecciosas emergentes.
3-Establecer las medidas preventivas que se considere oportunas en cada momento para asegurar el adecuado control y evitar en lo posible la diseminación de las enfermedades infecciosas emergentes en Euskadi.
Durante los últimos años la emergencia de nuevas enfermedades infecciosas ha sido una constante, así en el año 2000 surgió la alerta por la Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB) y su posterior relación con la “nueva variante” de Enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, el Síndrome Respiratorio Agudo y Severo (SRAS) en 2003 se extendió desde China a más de 30 países en apenas 7 meses, la gripe aviar H5N1 en 2006, la gripe pandémica en 2009, el nuevo coronavirus MERS-nCoV en 2012, el brote de gripe AH7N9 en 2013, el brote del Ébola en 2014 y recientemente la expansión del virus Zika. En muchos de esto casos se trata además de microorganismos desconocidos o que nunca antes habían tenido un impacto epidemiológico significativo en los humanos y cuya rápida expansión ha ocasionado Emergencias Sanitarias a nivel Internacional.
En cada uno de estos acontecimientos los servicios de Salud Pública del Departamento de Salud del Gobierno Vasco y los servicios asistenciales de Osakidetza han tenido que desarrollar procedimientos específicos de vigilancia epidemiológica, diagnóstico, prevención, manejo y tratamiento de estos pacientes en cada nivel del sistema sanitario al objeto de minimizar el impacto en la población de Euskadi y reducir la posibilidad de diseminación para evitar casos secundarios.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que fenómenos como la globalización actividad humana, el crecimiento de la población mundial, la rápida movilidad y el incremento de los viajes internacionales, el cambio climático o el aumento de la población a riesgo hacen que la expansión de estas enfermedades emergentes suponga un desafío creciente para la Salud Pública a nivel mundial. De ahí que, por ejemplo, desde mediados del año 2015 se esté registrando un aumento de casos de infecciones por virus Zika en diferentes países de América, particularmente en Brasil.
De hecho, el 1 de febrero de 2016 la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró esta situación como una Emergencia Sanitaria Internacional. Aunque, en el momento actual, tal y como ha recordado hoy el Presidente del Consejo Asesor de Enfermedades infecciosas emergentes, el epidemeólogo y responsable de los programas de Salud Pública de Osakidetza, Dr. Enrique Peiró “en Euskadi esta situación no constituye una amenaza grave para la Salud Pública dada la ausencia de un vector establecido para esta enfermedad; a corto plazo no se puede descartar la aparición de casos importados en nuestro medio, pero no tienen por qué suponer un problema de salud pública”.