La «Muerte Súbita» es el tema de la conferencia del Foro Médico que se celebrará hoy 25 de abril en el Colegio de Médicos de Valencia, abordándola desde diferentes perspectivas:, en el deporte, la cardíaca y en el lactante
Valencia, 25 de abril de 2013 (medicosypacientes.com)
El Foro Médico estará moderado por el Dr. Pascual Cuadrado y en él intervendrán los doctores Juan Albors, que abordará la muerte súbita en el deporte; Francisco Javier Chorro Gascó que tratará la muerte súbita cardiaca e Isabel Izquierdo Macián que hablará sobre la muerte súbita en el lactante.
La muerte súbita en el Deporte
Como expone el Dr. Juan Albors Baga, médico especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte, la muerte súbita constituye uno de los hechos más dramáticos con el que nos podemos encontrar en la práctica deportiva. Se entiende por Muerte Súbita del deportista la acontecida de forma inesperada y de causa natural, no violenta o traumática, durante o en la hora siguiente a la práctica deportiva.
No es una entidad frecuente aunque se desconoce con certeza su incidencia, pero las características de juventud y máximo rendimiento físico del deportista la convierten en un acontecimiento trágico y demoledor. La literatura recoge cifras muy dispares. La ausencia de un verdadero registro de casos de muerte súbita convierten las diferentes series publicadas en poco fiables e incompletas.
Uno de los trabajos más serios publicado, el que defiende la Federación Española de Medicina del Deporte (FEMEDE) junto con el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses de Madrid, habla de 14 muertes de media al año y del Fútbol como deporte con mayor incidencia.
Sin embargo, si se conocen bastante bien las causas que pueden producir la Muerte Súbita en el Deportista, siendo las enfermedades cardiovasculares las causas más frecuentes y distinguiendo entre las que asocian cardiopatía estructural (M. hipertrófica, arterioesclerosis, displasia arritmogénica, anomalías congénitas en las salidas de las coronarias, etc.) de las que no asocian cardiopatía como las arritmias malignas (síndrome de Brugada, QT largo congénito, taquicardias catecolinérgicas, etc.). Sí que parece bastante claro que la ATE es la causa más frecuente de muerte súbita en deportistas mayores de 35 años.
La única forma de luchar contra la muerte súbita en el deporte es prevenirla y dentro de las medidas preventivas, el Reconocimiento Médico Pre-competición juega un papel primordial.
Existe debate y controversia en cuanto a la batería de pruebas necesarias a realizar para garantizar la salud de nuestros deportistas; el modelo americano defiende la realización de una anamnesis familiar y personal completa junto a una exploración física exhaustiva. Este modelo se enfrenta al italiano que añade el electrocardiograma (ECG) y el ecocardiograma como pruebas básicas y obligatorias.
No existe un modelo español oficial y establecido aunque diferentes asociaciones luchan por el carácter obligatorio de un reconocimiento a caballo entre italianos y americanos con sólo la realización del ECG con carácter obligatorio como estandarte.
Queda mucho camino por recorrer en la instauración del Reconocimiento Médico Pre-competición, pero el acuerdo entre las diferentes asociaciones que luchan en la prevención de la MS del deportista y las bases están sentadas. Su implantación dependerá en gran medida del desarrollo completo y taxativo del proyecto de Ley «de salud y lucha contra el Dopaje».
Muerte cardíaca súbita
Francisco Javier Chorro Gascó, catedrático de cardiología centrará su exposición en la muerte súbita cardíaca.
La muerte cardiaca súbita es aquella muerte inesperada y rápida que ocurre en menos de una hora tras la aparición de síntomas, excluyendo causas no cardiacas. Los casos por 100.000 habitantes reportados en distintos estudios prospectivos se encuentran entre 90 y 100 en el estudio de Maastricht efectuado en 1997; 53 en el de Oregón efectuado en 2004; 51,2 en el irlandés efectuado en 2008, o 56 en el canadiense efectuado en 2004.
La mayoría de las veces (alrededor del 80%) estos episodios se relacionan con la cardiopatía isquémica, mientras que en el 20% restante están implicadas distintas patologías entre ellas las miocardiopatías y las alteraciones hereditarias de las propiedades electrofisiológicas cardiacas («canalopatías»).
En más de la mitad de los casos relacionados con la cardiopatía isquémica no había antecedentes de enfermedad coronaria y en muchas ocasiones los episodios ocurrieron fuera del hospital. El riesgo de muerte súbita en el infarto de miocardio es alto en la fase aguda (primeras horas) mientras que en las fases subaguda y crónica el riesgo es bajo si no hay deterioro importante de la función cardiaca o isquemia.
En estos pacientes el riesgo es alto si la función ventricular izquierda está muy deprimida o si presentan taquicardias ventriculares o síncopes no explicados. Cuando se consideran los episodios de muerte súbita en sujetos con edades inferiores a los 40 años la incidencia es menor (2,1 por 100.000 habitantes en el estudio holandés efectuado entre 1996 y 2006) y los episodios se relacionan también en una mayor proporción con la cardiopatía isquémica, aunque aumenta la proporción de enfermedades cardiacas hereditarias.
Causas genéticas
Entre las causas genéticas se encuentran las miocardiopatías hipertróficas que se encuentran en 1 de cada 500 personas de la población general, la displasia arritmógena del ventrículo derecho presente en 1 de cada 2000 a 5000 personas, el síndrome del QT largo que se encuentra en 1 de cada 5000 personas y también se pueden encontrar otros síndromes como el de Brugada, el del QT corto o el de las taquicardias ventriculares catecolaminérgicas, entre otros. Alteraciones estructurales como la necrosis, la fibrosis o la hipertrofia, junto con factores moduladores como el sistema nervioso autónomo, alteraciones electrolíticas, fármacos, tóxicos, isquemia o el estiramiento miocárdico facilitan que determinados factores iniciadores, como extrasístoles o cambios de frecuencia, conduzcan a la aparición de taquicardias ventriculares o fibrilación ventricular y la muerte súbita.
La identificación de personas con riesgo elevado, la prevención eficaz de las circunstancias que favorecen su desarrollo y la mejora de los procedimientos de control actualmente disponibles, entre ellos los desfibriladores automáticos implantables, constituyen algunos de los retos que plantea el problema clínico de la muerte cardiaca súbita.
Muerte súbita en el lactante
En el caso del Síndrome de la Muerte Súbita en el Lactante (SMSL) se define como la muerte súbita de un niño de menos de un año de edad, que ocurre aparentemente durante el sueño y que permanece sin explicación después de una investigación a fondo, que incluye autopsia completa, examen del lugar del fallecimiento y revisión de la historia clínica.
A nivel mundial se ha pasado de unas cifras anuales de 2% de mortalidad por SMSL a 0,5 gracias a las campañas informativas. En la Comunidad Valenciana las muertes ascienden a un 0,3.
La experta Isabel Izquierdo Macián, presidenta del grupo de Muerte Súbita del Lactante, comentará los conocimientos adquiridos sobre el SMSL en la actualidad, pues si bien continúa sin conocerse su etiología a pesar de los avances tecnológicos y científicos, las intervenciones sobre los factores de riesgo han contribuido al descenso de su incidencia.