El objetivo de las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud es ayudar a los países a prevenir y controlar mejor el cáncer de cuello de útero, que es una de las formas más mortíferas de cáncer para las mujeres del mundo entero. Según la OMS, esta patología provoca todos los años más de 270 000 defunciones, el 85% de ellas en países en desarrollo
Madrid, 5 de diciembre 2014 (medicosypacientes.com)
El objetivo de las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud sobre cáncer de cuello de útero es ayudar a los países a prevenir y controlar mejor esta patología, que es una de las formas más mortíferas de cáncer para las mujeres del mundo entero, pero también una de las más fáciles de prevenir, según la OMS. El cáncer cervicouterino provoca todos los años más de 270 000 defunciones, el 85% de ellas en países en desarrollo.
Bajo el título “Control completo del cáncer cervical: una guía práctica básica”, el documento fue presentado en la Cumbre de Líderes Mundiales de Cáncer, celebrada el pasado miércoles en Melbourne (Australia), y tiene como finalidad reducir el gasto económico y poder proporcionar tratamiento a mujeres de todo el mundo, pues se estima que un gran porcentaje carece de acceso a servicios sanitarios de prevención, tratamiento o cuidados paliativos. En este sentido, se calcula que al menos un millón de mujeres del mundo entero padecen cáncer cervicouterino, y muchas de ellas no tienen acceso a servicios de salud que las orienten sobre las medidas de prevención y les ofrezcan tratamientos curativos o paliativos.
La guía recomienda que, en lugar de centrar la atención en promover la realización de pruebas de cribado a las mujeres mayores de 29 años, se establezca una comunicación con un público más amplio: adolescentes, padres, educadores, líderes y profesionales de la salud a todos los niveles, de modo que las mujeres reciban información en todas las etapas de su vida.
La Dra. Nathalie Broute, experta de la OMS en prevención y control del cáncer cervicouterino, afirmó, al respecto que “las directrices actualizadas de la OMS sobre el cáncer cervicouterino pueden salvar la vida de niñas y mujeres del mundo entero. No existen fórmulas mágicas, pero si se combinan instrumentos más eficaces y asequibles para prevenir y tratar el cáncer cervicouterino será más fácil aliviar la presión que supone la enfermedad para los limitados presupuestos sanitarios, sobre todo de los países de ingresos bajos, y se contribuirá de forma importante a la eliminación del cáncer cervicouterino”.
Con respecto a la vacuna del Virus del Papiloma Humano para combatir esta patología, la guía propone reducir las dosis de vacunación de tres a dos, ya que, según señala, “la eficacia con dos dosis está comprobada, y así se reducirá el gasto sanitario que conlleva la vacunación”. Otro de los puntos donde hace hincapié el documento es el sometimiento de las mujeres a pruebas de VPH como herramienta de prevención, que reduciría la frecuencia del chequeo.
Asimismo, se destaca la importancia de tratar el tema de la discriminación por motivos de género y otras situaciones de desigualdad en relación con otros factores sociales (como recursos económicos, clase social, educación, religión y etnia) a la hora de diseñar políticas y programas de salud.
Según la Dra. Marleen Temmerman, directora del Departamento de Salud Reproductiva e Investigaciones Conexas, «si no abordamos el problema de la desigualdad de género y garantizamos a las mujeres el derecho a la salud, no dejará de crecer el número de mujeres que mueren a causa del cáncer cervicouterino».
Se adjunta Guía Cáncer Cuello Útero OMS en PDF.