Santander, 12 de noviembre 2012 (medicosypacientes.com)
-¿Considera que la autocrítica constructiva de las corporaciones médicas contribuye a marcar el camino de mejora y de cara a garantizar el escenario adecuado para el ejercicio de la medicina?
–El término «autocrítica constructiva» es oscuro y uno corre el riego de excederse en la crítica y terminar tirando piedras sobre nuestro propio tejado. Lo importante es comprender que la estructura colegial tiene que modernizarse en todos los ámbitos y dar impulso a esa modernización con equipos entusiastas en tres ejes: Formación, tecnología y sociedad.
-Las nuevas tecnologías con la presencia activa en las redes sociales y en todo el espacio virtual ¿deben imponerse en el Colegio de Médicos del Siglo XXI?
–En línea con lo que anteriormente he expuesto, considero que las nuevas tecnologías así como las redes sociales son evidentemente básicos.
-La apertura hacia la sociedad y la búsqueda de alianzas con los colectivos e instituciones es una constante de nuestras instituciones ¿se ha avanzado mucho en este terreno?
-En este apartado, considero que se debe avanzar más. Pero, sin duda, se avanza. Al tiempo también avanza el asociacionismo de pacientes y el social en general. Los Colegios de Médicos deben de estar ahí.
-¿Piensa que los profesionales que gobiernan las corporaciones colegiales están dotados de las herramientas necesarias y con el adiestramiento correcto para optimizar los resultados?
–Posiblemente no, es por ello esencial también que desde la Organización Médica Colegial se ofrezca formación en este aspecto.
-¿Qué fórmulas habría que emplear para transmitir la suficiente rigurosidad en el quehacer diario y que sirvan, además, para huir de fotogramas del ayer?
-Creo que el reto fundamental del Colegio de Médicos es hacerle útil para los colegiados y para la sociedad. No algo inerte y vigilante.