Colectivos de personas con discapacidad se han concentrado en frente del Congreso de los Diputados para exigir, mediante la simulación de un proceso electoral, a los partidos políticos que en la próxima legislatura modifiquen la actual Ley Electoral que niega el voto a unas 100.000 personas con discapacidad intelectual, enfermedad mental o deterioro cognitivo. También reivindican la accesibilidad universal a los colegios y procesos electorales "sin barreras, ni obstáculos"
Discapacitados reclaman su derecho a voto frente al Congreso de los Diputados
Bajo el lema ‘Vota para que votemos’, el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), junto a sus organizaciones miembro, han simulado un proceso electoral universalmente accesible, atendido por personas que no pueden votar.
Mediante la instalación de mesas electorales cerca de 1.000 personas votaron con papeletas accesibles, pidiendo el derecho de sufragio para toda la ciudadanía y la accesibilidad de los procesos electorales. Al encuentro también asistieron representantes de todos los partidos políticos.
Todo ello con el objetivo de exigir que se cumpla el tratado internacional de Naciones Unidas de Derechos de las Personas con Discapacidad, que desde 2008 establece que ninguna persona con discapacidad puede ser privada de su derecho de voto.
“Este tratado es de obligada aplicación en todos los países que la han ratificado, entre los que se encuentra España. Nuestro país tiene que cambiar la ley actual para cumplirlo porque es una ley vulneradora de derechos”, aseguró, para este medio, Luis Cayo, presidente de CERMI, quien denunció que “100.000 personas de determinadas discapacidades están privadas de su derecho de voto por ser distintas”.
“Nos concentramos en frente de la casa de las leyes para recordarle a los políticos que una de las primeras cosas que tienen que hacer cuando comience el próximo periodo de sesiones es cambiar la ley electoral y que todos podamos votar. Nadie se puede quedar sin votar por tener una discapacidad”, defendió el presidente del CERMI.
Todos los políticos asistentes mostraron su compromiso por recoger en sus programas el cambio de ley y garantizar la universalidad del proceso electoral. “Vamos a estar vigilando para que las primeras leyes que se aprueben en la próxima legislatura sea la modificación de la ley electoral y la garantía de que el proceso sea accesible”, señaló el presidente del CERMI quien espera que estas “sean las últimas elecciones donde haya gente que no vota”.
Las personas con discapacidad consideran necesario eliminar todos los obstáculos que encuentran algunas personas en los procesos electorales, que pese a tener reconocido el derecho de sufragio, se enfrentan a colegios electorales con barreras arquitectónicas, mítines con problemas de accesibilidad.
“A parte de la negación del derecho de votar, también hay una obstaculización del derecho. Si las oficinas de correos y los colegios electorales no son accesibles para personas con discapacidad, les están impidiendo ejercer su derecho a voto”, señaló Luis Cayo.
También denuncian los impedimentos para formar parte de una mesa electoral que sufren las personas con discapacidad. “Hay juntas electorales que no permiten que una persona ciega sea miembro de la mesa o personas sordas que necesitan algún elemento técnico no se lo dejan poner”, asegura el presidente del CERMI. “Les están impidiendo ser un agente del proceso como ser miembro de una mesa, presidente o vocal. Por eso recordamos la necesidad de que haya accesibilidad universal”, puntualizó.