La actual situación del Zika en Brasil ha llevado a más de 170 científicos a firmar una carta en la que alertan a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y al Comité Olímpico Internacional (COI) de los peligros de celebrar los Juegos en Río de Janeiro debido al virus Zika, y en la que instan a cambiar su sede o aplazarlos. Sumado a esto, algunos deportistas, como Pau Gasol, se plantean acudir a las Olimpiadas ante el desconocimiento de esta “extraña enfermedad”
La carta abierta, dirigida a la doctora Margaret Chan, Directora General de la OMS, está escrita por 186 científicos que alertan de los riesgos para la salud de deportistas, periodistas o turistas que puede conllevar este evento que se celebrará en la ciudad brasileña de Río de Janeiro, este próximo mes de agosto.
«La cepa del virus Zika brasileño daña la salud de una manera que la ciencia no ha observado antes. Un riesgo innecesario cuando se plantea que 500.000 turistas extranjeros procedentes de todos los países asistan a los Juegos», afirman los responsables de la misma.
A lo largo de siete puntos, en los que van desgranando su visión sobre el Zika, piden a las autoridades que deben aplazar la realización de los Juego Olímpicos o bien llevarlos a otra localización.
Resumen los problemas de este evento en tres: «que la cepa del virus Zika de Brasil tiene consecuencias médicas más graves que se sabía anteriormente, que Río de Janeiro es una de las partes más afectadas de Brasil, y que el intento de matar mosquitos en Río no está cumpliendo con las expectativas».
Por su parte, la OMS ha hecho caso omiso a la petición de los científicos. Pero los investigadores alertan del riesgo alegando que, además de los casos de transmisión sexual, se podrían generar nuevas epidemias en otros países. Y aunque los mosquitos de algunos países no pueden contagiar el virus, en otros sí se podría propagar.
En caso de que algún deportista de un país cuyos mosquitos puedan transmitir el Zika se contagie, podría iniciarse una epidemia en ese país.
Deportistas se plantean su asistencia
El jugador de la selección española de baloncesto Pau Gasol ha levantado la voz de alarma respecto al virus Zika, explicando que «la situación tiene gravedad suficiente» como para que algunos deportistas se estén planteando acudir a los Juegos Olímpicos de Río, confirmando que él mismo está «valorando» la posibilidad de no acudir a la competición por los riesgos que entraña la enfermedad.
«La situación tiene gravedad suficiente y el desconocimiento es grande incluso entre los propios expertos. Hay disparidad entre 150 expertos y algunos piden que los Juegos se muevan o se pospongan. Por mucho que haya palabras tranquilizadoras, hay un debate. Yo lo estoy valorando como cualquier otro atleta o persona que esté valorando ir a Río», explicó Gasol en un acto del Banco Popular en Madrid.
Al deportista, no le «extrañaría que algunos atletas decidieran no participar para no poner en riesgo su salud ni la de sus familiares». «Es una situación bastante delicada», abundó el pívot, que pidió que «tanto los comités olímpicos nacionales como las organizaciones de salud mundiales informen al cien por cien y con la mayor claridad posible».
«Estoy siendo bastante proactivo para que se dé a conocer toda la información posible. Me siento responsable de concienciar e informar de algo de lo que no estamos hablando lo suficiente y que es bastante desconocido por regla general», dijo, pidiendo que «se anteponga la salud de los deportistas, pero también de aficionados y familiares que se desplacen a Río».
En este sentido, advirtió de que los Juegos «pueden ser una oportunidad para que este virus se propague», pero también otras enfermedades. «Tampoco se habla mucho del virus del dengue, que ha multiplicado su número de infecciones en un 320 por ciento», subrayó.
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