Carlos Mur, hasta ahora responsable del Hospital José Germain, de Leganes, ha sido nombrado nuevo gerente del Hospital de Fuenlabrada en sustitución de Manuel de la Fuente, quien presentó, días atrás, su dimisión tras corroborarse por parte de la Consejería de Sanidad de la CAM, una fuga de datos de pacientes del centro sanitario a dos clínicas privadas
Madrid, 11 de septiembre 2014 (medicosypacientes.com/E.P.)
El hasta ahora gerente del Hospital Psiquiátrico José Germain, de Leganés, Carlos Mur, fue ayer nombrado nuevo gerente del Hospital de Fuenlabrada en sustitución de Manuel de la Fuente, quien presentó su dimisión tras confirmarse una fuga de datos de pacientes del citado centro sanitario a dos clínicas privadas.
Mur es licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Zaragoza, doctor en Neurociencias y en Medicina con especialidad en Psiquiatría por la Universidad Complutense de Madrid, y profesor Asociado. Facultad de Medicina y Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Europea de Madrid. Mur ha sido hasta octubre de 2011 subdirector de la Oficina Regional de Salud Mental y desde junio de 2013 es coordinador científico de la Estrategia en Salud Mental del Servicio Nacional de Salud, Desde 2011 ocupaba el cargo de gerente del Instituto Psiquiátrico José Germain de Leganés.
El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Javier Rodríguez, confirmó el nuevo nombramiento de Mur tras asistir a la presentación de la Campaña de Prevención de la Depresión y el Suicidio en el Hospital 12 de Octubre. La llegada del nuevo gerente al Hospital de Fuenlabrada se produce tras la dimisión del anterior gerente, de la Fuente, quien dejó el cargo tras corroborarse la existencia de “irregularidades administrativas” en el centro, que llevaron a la fuga de datos de pacientes, de lo que informó el propio Rodríguez el pasado martes, quien aceptó su dimisión. Además, Rodríguez informó del cese del director médico y de la suspensión como tal del jefe de admisión. Además, anunció la apertura de expedientes a los administrativos que pudieran estar implicados en estos hechos.
Según explicó el consejero de Sanidad, “se estaban haciendo cosas mal con dos clínicas”, Maestranza y Los Madroños, “pero de forma diferente”. El primer centro estaba contratado desde marzo de 2013 y hasta septiembre del mismo año funcionaba “regularmente”, es decir, cuando un paciente solicitaba una prueba era el Hospital el que le llamaba para concertar la cita con la clínica. “No sabemos por qué circunstancias decidieron cambiarlo y que fuera la propia clínica la que llamara a los pacientes. Mientras, la clínica Los Madroños empieza a funcionar de esta forma desde el primer momento, febrero de 2014, según indicó el responsable del Gobierno regional, quien aseguró que esta posibilidad no está contemplada ni en los convenios con las clínicas ni el Acuerdo Marco. “Eso es una irregularidad administrativa que no se puede aceptar”, según declaraciones de Rodríguez recogidas por Europa Press.
Al parecer, el Hospital instaló en la clínica Los Madroños un programa informático por el que el centro privado tenía acceso a los datos de los pacientes, mientras que la clínica Maestranza recibía en mano la información en un primer momento, y luego por correo electrónico encriptado, según señalaron fuentes de la Consejería.
Tras calificar los hechos de “tremendamente graves”, se ha asegurado que los está estudiando el gabinete jurídico y que “es muy probable que todo esto se ponga en conocimiento de la Fiscalía, por si existiera algún delito”. Asimismo, según fuentes de la Consejería consultadas por E.P. se va a remitir el informe a la Fiscalía, que podría enviárselo a su vez a la Agencia de Protección de Datos.
En lo que respecta a las clínicas, Rodríguez señaló que se les va a abrir un expediente y que, de momento, “la decisión que se ha tomado es que no se les envíe ni un solo paciente”, al tiempo que “se les ha cortado la información de forma radical”.
“Solo podemos juzgar la parte administrativa pero si existiera alguna responsabilidad penal, el juez la determinará”, según el consejero, quien añadió que “no sabe si existen denuncias individuales pero que de ser así se les reclamará el informe y lo remitirán”.
La inspección terminó su trabajo el pasado lunes, aunque Rodríguez reconoció que le hubiera gustado que ésta hubiera ido “más rápido”, pero, como explicó “el mes de agosto es un mes “atípico” y “personas que tenían que compadecer” no estaban.
“No vale que la cúpula del Hospital de Fuenlabrada sea el chivo expiatorio de algo que nos tememos no sólo está limitado al Hospital de Fuenlabrada sino que sucede en otros centros, como el tiempo pondrá en evidencia”, añadió Freire.
Alrededor de 580 historiales podrían haber sido filtrados del Hospital de Fuenlabrada a las citadas clínicas sin el conocimiento del consejo de administración del centro sanitario. El caso fue puesto el pasado mes de agosto en manos de la Fiscalía y de la Agencia de Protección de Datos para denunciar la situación. Al respecto, el artículo 10 de la Ley Orgánica de Protección de Datos de carácter personal, indica, sobre el deber de secreto, que “el responsable del fichero y quienes intervengan en cualquier fase del tratamiento de los datos de carácter personal están obligados al secreto profesional respecto de los mismos y al deber de guardarlos”.