martes, abril 23, 2024

Portal informativo de la Organización Médica Colegial de España

InicioOMCLa industria farmacéutica defiende que "el valor de los nuevos medicamentos justifica...

La industria farmacéutica defiende que «el valor de los nuevos medicamentos justifica su precio»

 

«El valor de los nuevos fármacos justifica su precio», según defendieron los dos representantes de la industria farmacéutica en la Jornada sobre Hepatitis C, en la mesa sobre «El fármaco», frente a otros ponentes que se mostraron a favor de un «equilibrio justo entre el derecho a la salud y un beneficio razonable»

 

Madrid, 6 de marzo de 2015 (medicosypacientes.com/T.A.)

En la mesa participaron el Dr. Ramón Gálvez, especialista en Neurología quien actuó de moderador, y los ponentes Jose María Abellán, vicepresidente de la Asociación Española de Economistas de la Salud; Martín Sellés, presidente de los laboratorios Jassen, y Humberto Arnés, director general de Farmaindustria.

El Dr. Roman Gálvez, especialista en Neurología y experto en gestión sanitaria, moderó este debate, poniendo sobre la mesa también su experiencia como enfermo de Hepatitis C, sometido a tratamientos anteriores a los nuevos fármacos, que «casi me matan», como puso de manifiesto.

Tras señalar el importante papel que ha tenido el Plataforma de Afectados por la Hepatitis C que «ha conseguido poner sobre la mesa este problema» y felicitar a la OMC por la iniciativa de la Jornadas, defendió la existencia de un equilibrio entre «el derecho a la salud y el derecho razonable de la industria a unos beneficios».

Para el Dr. Gálvez, el problema de los nuevos medicamentos es el precio y pidió a la industria farmacéutica  transparencia en los costos de investigación, producción, marketing y comercialización de los nuevos fármacos para establecer ese beneficio «razonable».

José María Abellan, en representación de la Asociación de Economía de la Salud (AES) de la que es vicepresidente, abordó el tema de «El Fármaco» desde la perspectiva de los «Costes directos e indirectos de la Hepatitis C. Evaluación económica de las alternativas terapéuticas».

En su exposición, explicó que para evaluar el coste-efectividad de un medicamento es necesario tener en cuenta los costes directos relacionados con el tratamiento, tanto sanitarios del precio del medicamento como los no sanitarios y que están vinculados a servicios sociales, cuidados familiares, así como  los costes indirectos de pérdidas de productividad a consecuencia de la enfermedad. También, según el experto, hay que hacer una evaluación económica para comparar los costes y beneficios de las alternativas terapéuticas, en el caso de la Hepatitis C, con el Interferon y/o las terapias triples y, además, realizar ensayos clínicos aleatorios controlados para establecer correctamente la eficacia.

Teniendo en cuenta todo ello, para José María Abellán, hay terapias triples aplicadas hasta ahora que se pueden considerar coste-efectividad, al igual que el tratamiento con sofosbuvir de 12 semanas, mientras que otras combinaciones que aparecen en el Plan Estratégico para el Abordaje de la Hepatitis C, en su opinión, no lo son. El problema de fondo y principal limitación para analizarlo correctamente tiene que ver, según José María Abellán, con la falta de datos de eficacia y los «reducidos ensayos clínicos que impiden hacer comparaciones». Por ello, a la pregunta de si estos nuevos medicamentos tienen coste-efectividad para el SNS, dijo que es necesario hacer grandes estudios para responder.

Martin Sellés, presidente de los laboratorios Janssen, quien abordó la investigación y producción de medicamentos antivirales para Hepatitis C, inició su exposición poniendo de  manifiesto que el objetivo de su compañía no es otro que «descubrir nuevos medicamentos que puedan curar enfermedades que hoy no tienen cura» y dijo que la industria gasta 7.000 millones de dólares al año en I D.

Tras señalar que no recuerda en sus 25 años como médico y profesional de Jassen la cantidad de información que ha generado la Hepatitis C, aseguró que la aparición de los nuevos medicamentos es una «buena noticia para los miles de pacientes que se van a curar y evitar otros problemas de salud como cirrosis, cáncer o un trasplante» y también es una «buena noticia para el SNS porque va a generar muchos ahorros a medio y largo plazo».

Sobre el controvertido precio de los nuevos medicamentos, defendió que «el valor de estos medicamentos justifica su precio». Dijo que el Gobierno «ha negociado bien» y que, en comparación con otros países de nuestro entorno como Italia y Portugal donde todavía no se han aprobado estos fármacos, «los contribuyentes tienen que estar relativamente satisfechos» de en que se emplean sus impuestos. Para él, el problema radica en la reducción del gasto sanitario con respecto del PIB que actualmente está en el 6% y defendió la subida de un punto, que supondrían 10.000 millones más dedicados a sanidad, así como una financiación especial para poder pagar los nuevos medicamentos de la Hepatitis C.

Por su parte, Humberto Arnes, director general de Farmaindustria, se sumó a la satisfacción expresada por Martín Sellés, de «contar con estos nuevos tratamientos que salvan vidas», algo de los que «nos congratulamos todos: los pacientes, los profesionales, la industria y el SNS».

Ante las críticas generalizadas al sector por el precio de los medicamentos, dijo que «bendito problema» si con estos medicamentos se alcanzan unos resultados de curación del  90% y se consiguen unos «elevados ahorros» a medio y largo plazo. Y, tras señalar que el Gobierno lo ha hecho bien por los precios que ha conseguido, comparó los 727 millones destinados a los tratamientos de la Hepatitis C con lo que  el Gobierno destina al AVE. «Con este dinero, por ejemplo, se podían hacer 40/50 km. del tren de alta velocidad» y se preguntó «donde debe la sociedad priorizar el progreso».

Finalmente, habló de las patentes, como «el mecanismo más eficaz para apoyar la innovación del medicamento» y «acelerar el conocimiento» y consideró una «barbaridad» las propuestas de expropiación de patentes porque nos «convertiríamos en un país tercermundista».

A este respecto, en el debate posterior, el moderador Dr. Gálvez manifestó que «el problema no es la patente, sino el precio que se asocia a una determinada patente» y añadió que «cuando el precio es excesivo y está por encima de los límites razonables, se cuestiona el sistema en general».

Discrepó con los representantes de la industria sobre el valor extraordinario que aportan los medicamentos y se justifica su precio por ello. Puso como ejemplo que «si pusieran el agua al precio del valor, a un precio brutal porque la necesitamos para vivir, entonces no podríamos beberla» y dijo que «nuestra salud necesita determinados tipos de fármacos, como el agua, porque si no, los pacientes se mueren y por ello, reconocemos su actividad y  les apoyamos en la investigación, pero tiene que haber un equilibrio entre el derecho a la salud y el derecho al beneficio razonable».

Algunos enfermos presentes en la Jornada expresaron, desde  la situación emocional en la que se encuentran, sus críticas al Plan del Gobierno y su opinión respecto a lo que denominaron «mercantilismo» de la industria farmacéutica.

El presidente de la OMC, Dr. Juan José Rodriguez Sendín, intervino en el debate dando la razón a los pacientes, que  a lo largo de un año,  no han tenido acceso al tratamiento porque «ha habido que negociar la bajada de precios» y eso tiene consecuencias para ellos.

Celebró la llegada de estos tratamientos innovadores, aunque alertó del cuidado que hay que tener porque «nos podemos cargar el Sistema» y, tras poner de manifiesto que  los 727 millones pueden suponer unos 13.000 médicos de plantilla,   abogó por buscar un «equilibrio justo entre el precio, el valor y lo que se puede pagar» y expresó sus dudas de que «con ese precio, se vaya a servir a todos los que lo necesitan. Ojalá», concluyó.

Relacionados

TE PUEDE INTERESAR

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Más populares