El Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME) requiere de una responsabilidad compartida entre los Colegios de Médicos, que velan por la buena praxis de los profesionales, y las Administraciones sanitarias, que velan por la seguridad del paciente. Algo que requiere de una profunda colaboración y compromiso político para garantizar la accesibilidad en equidad, una atención de calidad y dar mayor visibilidad a este programa que atiende a médicos con trastornos mentales y/o adicciones. Tal y como pusieron de manifiesto los participantes a la "Jornada 20 años del PAIME" organizada por la Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC)
Esta jornada, que se celebró ayer en la sede de la corporación médica con motivo del 20º Aniversario del PAIME, contó con la participación los doctores Serafín Romero, presidente de la FPSOMC y OMC; Jaume Padrós, presidente del Colegio de Médicos de Barcelona; Dr. Tomás Cobo, vicepresidente primero de la FPSOMC; Dr. Roberto Sabrido, ex Consejero de Sanidad de Castilla La Mancha y director gerente de Coordinación e Inspección del SESCAM; Mª Ángeles López Orive, subdirectora General de Ordenación del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social e Isabel Baena, viceconsejera de Salud de la Junta de Andalucía.
El PAIME es un programa implantado en todas las Comunidades Autónomas, en el ámbito de los Colegios de Médicos y bajo el paraguas de la FPSPOMC que contribuye a la financiación del mismo junto a las Administraciones públicas. En estos 20 años un total de 4.294 profesionales han pasado por el mismo y en un 92 % de los casos se han recuperado e incoporado de nuevo al ejercicio de la Medicina.
Isabel Baena: «El PAIME requiere de responsabilidad compartida entre Administraciones y Colegios. Es un reto de todos»
Para Isabel Baena, viceconsejera de Salud de la Junta de Andalucía, el PAIME supone «un modelo de éxito que cuenta con el de trabajo de mucha gente» y que, aunque nació hace 20 años en el Colegio de Médicos de Barcelona «ha logrado extenderse a todo el territorio nacional».
En su intervención felicitó a todos los profesionales por la «valentía de desterrar el concepto de corporativismo y reconocer que los médicos también enferman y no ocultar el problema». Resaltó que el PAIME requiere «de la responsabilidad compartida entre los Colegios de Médicos que velan por la buena praxis de los profesionales y de las Administraciones sanitarias que velan por la seguridad del paciente» y que se trata de «un problema de salud pública con responsabilidad ética de ambos».
En Andalucía, contó, hay Unidades ambulatorias de atención PAIME en todas las provincias y actualmente atienden a 70 profesionales. Para ella, el objetivo final del programa es que el médico se reincorpore a su trabajo después de recuperarse y resaltó la importancia de «cuidar al que cuida».
Algo en lo que, según matizó, es «necesario generar estructuras que garanticen una mayor accesibilidad con equidad en todas las Comunidades Autónomas, una atención de calidad y den mayor visibilidad al programa» porque «la verdadera bondad del PAIME tiene que ver con la confidencialidad pero eso no es enemigo de la transparencia y visibilidad». Para todo ello, mostró su compromiso y disposición y la necesidad de contar con profesionales expertos, así como de hacer un esfuerzo por la formación. «Esto es un reto y responsabilidad de todos».
Garantizar la calidad desde la evidencia científica, compartir experiencias entre Comunidades Autónomas, mantener una colaboración más profunda entre Colegios y Administración sanitaria para garantizar la atención integral y protocolarizarla, medir los resultados, son otros de los retos que tiene por delante el PAIME.
Dr. Tomás Cobo: «El PAIME es un programa exportable a otras profesiones sanitarias que debería llevarse al Consejo Interterritorial»
Por su parte, el Dr. Tomás Cobo tras agradecer a los pioneros del PAIME, aludió a las palabras de la viceconsejera de «responsabilidad compartida y que no se vea como corporativismo» y explicó que este programa «no exclusivo de los médicos» y que es algo exportable aunque «tenga un vínculo directo con la salud pública y seguridad clínica». Es por ello que, animó a que a Baena a que haga proselitismo y lleve el PAIME al Consejo Interterritorial del Servicio Nacional de Salud de España. «Es importante extender esta política de ayuda a los profesionales con problemas de salud mental y/o adicciones», matizó el Dr. Cobo quien agradeció la disposición y apoyo de ambas responsables políticas y resaltó la importancia de «remover conciencias. Porque todos tenemos casos cercanos».
Mª Ángeles López Orive: «Es necesario crear cultura de autocuidado de la salud, de seguridad, de responsabilidad y profesionalismo»
Mª Ángeles López Orive, se comprometió a llevarse «muchas propuestas» de esta Jornada e hizo alusión a «las experiencias personales que hemos vivido de acompañar a compañeros al PAIME para reorientar su vida». Explicó que aunque no hay actuaciones específicas ni líneas definidas en el Ministerio de Sanidad para la Salud laboral de los profesionales médicos, hay una guía específica para prevención en bioseguridad y que desde el Ministerio tienen «mucho que aportar».
«Nos comprometemos a trabajar con vosotros porque si tenemos la competencia y el apoyo a la salud laboral relacionada con las comisiones laborales de los profesionales», explicó López Orive quien añadió que se está trabajando en la línea de prevención y actuación a las agresiones sanitarias como factor de riesgo para la salud y bienestar de los profesionales sanitarios.
Actualmente, tal y como puso de manifiesto en su intervención, se está desarrollando un replanteamiento de la formación sanitaria especializada con adquisición de competencias esenciales para todos los profesionales que contemple la ética y el profesionalismo, la responsabilidad, y la seguridad clínica. «Queremos introducir esto en los residentes como una competencia esencial y fomentar el autocuidado de la salud», dijo. Algo en lo que también abogó por incorporarlo a las Facultades en los estudios de Grado. «Es necesario crear cultura de autocuidado de la salud, de seguridad, de responsabilidad y profesionalismo», subrayó.
Desde el Ministerio se está trabajando porque las Unidades docentes y las comisiones de docencias vigilen la salud de los residentes, ya que se encuentran en una época de especial vulnerabilidad. «Detrás de la sobrecarga puede haber problemas de salud mental», expuso.
Sabrido: «Las Administraciones Públicas Sanitarias deben colaborar con los Colegios Profesionales en la puesta en marcha del PAIME y en su divulgación»
Roberto Sabrido, exconsejero de Castilla-La Mancha y director gerente de Coordinación e Inspección del SESCAM, subrayó que “las características propias del médico enfermo y la estigmatización de ciertas patologías existentes todavía en la sociedad, hace necesario garantizar una confidencialidad al profesional que solamente el PAIME soluciona”.
La función del profesional médico es “muy especial y particular”, porque tiene la responsabilidad sobre sus pacientes, a los que las Administraciones tiene la obligación de proporcionarles actividades preventivas, asistenciales, rehabilitadoras y paliativas, obligaciones que no pueden ejercer correctamente si no se cuenta con los profesionales adecuados en número, formación y capacidad, “por ello el médico enfermo, además de un problema individual, es un problema para la organización”, explicó.
El médico enfermo por problemas psicopatológicos pone en riesgo muchas cosas además de su propia salud., la seguridad del paciente, al no ejercer una adecuada praxis, pone en riesgo el buen trabajo en equipo, sobrecarga de trabajo a sus compañeros, si no es sustituido, con las consecuencias que esto también puede tener para los pacientes, y pone en riesgo su propia carrera profesional.
Según Sabrido, “asegurar la buena praxis médica y la seguridad del paciente también forma parte de las obligaciones de los Colegios de Médicos, y por lo tanto si los colegios tienen obligaciones y objetivos compartidos, también debe compartir solución a los problemas ya que eso hace que seamos más eficaces y por eso el PAIME es fundamental”. También las Administraciones Públicas Sanitarias tienen obligaciones que hacer en este campo a través de la “sensibilización de los propios profesionales y mediante la colaboración con Colegios Profesionales en la puesta en marcha del PAIME y en su divulgación entre los profesionales”.
No obstante, Sabrido explicó que “también el PAIME, desde mi punto de vista, tiene que avanzar, solucionar retos pendientes y afrontar problemas de futuro”. Así, debe buscar “una mayor relación y colaboración con los servicios de Prevención de Riesgos Laborales, sobre todo en los aspectos preventivos, aunque sabemos todos de que garantizar la confidencialidad que busca el médico enfermo y que ampara el PAIME puede chocar con la obligatoriedad de información que tienen los Servicios de Prevención y las competencias de los Delegados de Prevención en representación de los trabajadores. Se debe estudiar muy detenidamente como mejorar esta relación que es muy necesaria”.
Además, “debe hacer frente a la feminización, que hace necesario incorporar la perspectiva de géneros para analizar y actuar sobre las peculiaridades de enfermar de hombres y mujeres, lograr una mayor implicación en formación y promoción, así como disponer de estrategias para la divulgación entre los propios médicos, las administraciones públicas y la sociedad en general e implicar a otras Administraciones Públicas, como puede ser el INSS”, concluyó.
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