La Asamblea de Médicos de Hospitales de la Organización Médica Colegial (OMC), celebrada el pasado 21 de noviembre en formato híbrido desde la sede de la Organización Médica Colegial, abordó algunos de los desafíos más relevantes para la profesión en el actual contexto sanitario.
Bajo la presidencia de la Dra. Pilar Sánchez Conde, representante nacional de la sección colegial de médicos de hospitales, el encuentro reunió a los representantes provinciales de médicos de hospitales de los Colegios de Médicos para analizar cuestiones de gobernanza, profesionalismo, planificación sanitaria y condiciones laborales.
La primera intervención fue realizada por el Dr. Juan José Rodríguez Sendín, expresidente de la OMC y médico de familia de reconocido prestigio, con una amplia trayectoria en bioética, deontología profesional y políticas sanitarias. Ha presidido durante años la Comisión Central de Deontología y ha participado en múltiples grupos de trabajo nacionales e internacionales sobre profesionalismo médico y calidad asistencial. Presentó el Observatorio de la Profesión e Identidad Médica (OPIMED), un órgano asesor orientado a generar inteligencia profesional, ética y científica destinada a fortalecer el papel del médico en la gobernanza del sistema sanitario. En su exposición, analizó los elementos que configuran la actual crisis estructural del SNS —déficit de profesionales, falta de incentivos, variabilidad clínica, aumento de la cronicidad y desigualdades territoriales— e insistió en la necesidad de avanzar hacia un modelo sustentado en la profesionalización directiva, la participación organizada de los médicos, la transparencia, la seguridad del paciente y la acreditación de los servicios asistenciales.
El Dr. José Ramón Repullo Labrador, profesor emérito de Planificación y Economía de la Salud de la Escuela Nacional de Sanidad del Instituto de Salud Carlos III, con una dilatada carrera en investigación, docencia y asesoramiento en políticas públicas, reformas sanitarias, gobernanza y organización de sistemas de salud, presentó a continuación el documento “El Buen Gobierno de los Centros Sanitarios desde la perspectiva de la Profesión Médica”, elaborado por OPIMED. Este informe plantea una visión integral de la gobernanza de los centros sanitarios —públicos y privados— basada en siete requisitos esenciales: reglamentos visibles y actualizados; publicación de cuadros médicos y carteras de servicios; activación real de las juntas técnico-asistenciales; fortalecimiento de las comisiones clínicas y de seguridad del paciente; creación de comisiones de credenciales que apoyen la evaluación de méritos; establecimiento de sistemas garantistas de denuncia anónima; y órganos autonómicos dedicados a la inspección, evaluación de la calidad y seguridad clínica.
El documento desarrolla además diez líneas estratégicas que constituyen un marco de actuación orientado a fortalecer la participación profesional, la calidad, la transparencia, la profesionalización directiva, la gestión clínica, la articulación territorial de especialidades y la evaluación de modelos integrados de atención y la rendición de cuentas en los centros sanitarios:
- Impulsar modelos de gestión con mayor autonomía y responsabilidad en los resultados.
- Fomentar normativas y reglamentos que consoliden una cultura de buenas prácticas y ética profesional.
- Potenciar la participación, la transparencia y el acceso público a la información sobre desempeño.
- Reforzar el papel de las juntas técnico-asistenciales en las decisiones presupuestarias, contractuales y estratégicas.
- Implantar órganos colegiados de gobierno responsables de planificación, presupuestos, inversiones, cartera de servicios y memoria anual.
- Profesionalizar la dirección mediante sistemas de concurrencia competitiva y evaluación pública de méritos.
- Dar estabilidad y transparencia a los contratos de gestión entre la autoridad sanitaria y los centros, con visión plurianual.
- Recuperar la gestión clínica como estructura organizativa, apoyada en institutos, áreas y acuerdos de responsabilidad asistencial.
- Desarrollar redes regionales multihospital y multiespecialidad para mejorar la articulación territorial.
- Evaluar los modelos de integración entre hospital y atención primaria y, cuando proceda, crear órganos de gobierno propios para este nivel asistencial.
El texto propone culminar estas reformas mediante una Ley Estatal de Buen Gobierno que establezca principios básicos y evaluables para todos los centros sanitarios, con especial énfasis en la prevención del fraude, la rendición de cuentas y la participación profesional organizada.
La Dra. Pilar Sánchez Conde, una de las integrantes junto con ambos ponentes del grupo redactor del documento, subrayó que la buena gobernanza es una necesidad ineludible para los médicos, puesto que son quienes consumen la mayor parte de los recursos diagnósticos y terapéuticos y, por tanto, ejercen una responsabilidad directa en la sostenibilidad del sistema. Destacó que los profesionales tienen el deber de garantizar calidad, eficiencia y equidad, aunque afrontan obstáculos derivados de la sobrecarga asistencial, la escasez de especialistas, la burocracia y la limitada autonomía profesional. Señaló que la innovación, la docencia y la investigación constituyen pilares irrenunciables de la actividad hospitalaria y defendió que la gobernanza clínica es indisociable de la calidad y la seguridad del paciente. Reafirmó que el liderazgo clínico del médico sitúa siempre al paciente en el centro del proceso asistencial, lo que define la esencia misma del ejercicio profesional.
La jornada también contó con la intervención de la Dra. María José García Mateos, representante de la sección de hospitales del Colegio de Médicos de Murcia, secretaria general de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) de Murcia y secretaría técnica de hospitales de CESM nacional. La Dra. García Mateos actualizó el borrador del Anteproyecto de Ley del Estatuto Marco del personal estatutario y analizó la situación de la convocatoria de huelga médica prevista para diciembre, ofreciendo una visión fundamentada sobre los retos laborales y organizativos que afronta el colectivo en un momento decisivo para el futuro de la profesión.



