El pacto por la sanidad, la salud mental de los profesionales, la situación de la Atención Primaria, la fidelización y captación de médicos o la dignificación de la profesión en el sector privado fueron algunos de los temas que se abordaron en el debate autonómico sobre política sanitaria organizado por el Col·legi Oficial de Metges de les Illes Balears (Comib)
En el debate, que estuvo moderado por el Dr. Carles Recasens, presidente del Comib, participaron Patricia Gómez (PSIB-PSOE), Javier Ureña (PP), Esperança Sans (Unidas Podemos), Juanma Gómez (Ciudadanos), Albert Pou (MÉS), Idoia Ribas (VOX) y Miquel Munar (El Pi).
Patricia Gómez (PSIB-PSOE) aseguró que “la salud es una inversión y continuaremos incrementando el presupuesto”. Puso en valor que se han contratado 5000 profesionales durante las dos legislaturas, se ha producido un incremento de 900 millones de euros en el presupuesto y expuso que desde el diálogo y el consenso se ha de defender un modelo de sanidad pública, “que es un auténtico tesoro de este país”.
Javier Ureña (PP) señaló que “la sanidad balear está hoy peor que hace ocho años” y criticó una “errática política de recursos humanos, tal y como manifiestan los mismos profesionales”. Aludió a las listas de espera, lamentó que “la asistencia sanitaria es desigual y asimétrica” y propuso “la construcción de vivienda específica en las zonas en las que hagan falta sanitarios”, así como una deducción autonómica en IRPF para quienes ocupen plazas de difícil cobertura.
Esperança Sans (Unidas Podemos) remarcó su compromiso de defender una sanidad “pública, universal y gratuita” y destacó la necesidad de elaborar un plan a 10 o 20 años para afrontar el reto de la falta de médicos ante las jubilaciones de profesionales que están por llegar. Asimismo, rechazó el copago sanitario porque “la sanidad no es un negocio sino un derecho universal”.
Juanma Gómez (Ciudadanos) hizo hincapié en que “cuando se habla de cuidar al cuidador, hay que pagar los que corresponde por dignidad”. También se mostró partidario de colaborar con la privada y defendió la necesidad de desburocratizar la labor del médico.
Albert Pou (MÉS) apostó por la sanidad pública que, añadió, debe ser “de calidad, sostenible y eficiente”. Para ello, se requiere de una “profunda transformación y de reorientarla hacia nuevos problemas como la salud mental o la cronicidad”. Unas Islas “habitables”, dijo, ayudarían a captar profesionales, pero también nuevas medidas de desarrollo profesional.
Idoia Ribas (VOX) explicó que “con mil millones de euros más de presupuesto no hemos tenido reducción de listas de espera, ni mejoras en las condiciones retributivas de los sanitarios, ni nuevas infraestructuras o una salud mental de calidad”. Además, alegó por “dejar de exigir el catalán porque es una barrera de entrada para los médicos”.
Miquel Munar (El Pi) subrayó que hay que buscar la “excelencia asistencial”, destacó que la Atención Primaria “es el gran reto” e incidió en la necesidad de potenciar los recursos sociosanitarios, los cuidados paliativos, la salud mental y el cuidado de los profesionales.
El presidente del Comib, Dr. Carles Recasens, concluyó que “como institución no entendemos de izquierdas o de derechas, defendemos lo mejor para los médicos, para los pacientes y para la profesión”, por este motivo tendió la mano al que salga elegido en las urnas y pidió que les hagan participes de las decisiones que tomen.