El Dr. Serafín Romero destaca, hoy Día Nacional Contra las Agresiones a Sanitarios, el papel del Observatorio de Agresiones de la OMC en la lucha contra esta lacra y afirma que «debemos exigir que la agresión a un médico en el ejercicio privado sea un agravante, para poder equiparar la pena» en una entrevista concedida a Médicos y Pacientes
Madrid, 20 de marzo de 2014 (medicosypacientes.com)
-Han pasado cuatro años desde la puesta en marcha del Observatorio de Agresiones. ¿Cuál es el balance de lo conseguido en este tiempo?
El poder disponer del análisis de más de 1700 comunicaciones de agresiones a medicos e igualmente de más de 100 sentencias judiciales. Cuatro años que han servido para consolidar cómo referencia al Observatorio en el marco de cualquier análisis o estrategia que se encamine a estudiar este fenómeno.
-El trabajo del Observatorio de Agresiones ¿ha repercutido en una mayor concienciación por parte de la población ante este problema?
De los datos de los dos últimos años se deduce que existe una reducción del número anual de agresiones comunicadas. Consideramos que en algo estamos contribuyendo desde los Colegios de Medicos con el Observatorio de las Agresiones.
El hecho de que hayamos sido recibidos por el Ministerio de Sanidad y el de Justicia, ha contribuido a la puesta en marcha de acciones específicas ante las agresiones.
Por otro lado desde los Colegios, con nuestra denuncia continúa de las agresiones, venimos buscando la complicidad de los ciudadanos y de las Asociaciones de Pacientes en particular.
-El Observatorio ha mantenido una reunión con Soledad Becerril, Defensora del Pueblo ¿Qué le han trasladado y qué esperan tras este encuentro?
Le hemos transmitido nuestro compromiso con el objetivo de reducir al máximo esta lacra y hemos solicitado todo su apoyo ante los poderes públicos para la puesta en marcha de una estrategia común donde no queden fuera los ciudadanos que son los verdaderos depositarios de nuestro interés en proporcionar una asistencia de calidad y sin violencia.
-Algunos colegios han puesto en marcha convenios con la Fiscalía ¿cómo han repercutido estos acuerdos? ¿cree que deberían hacerse un acuerdo marco a nivel nacional?
Estamos trabajando con la Fiscalía General del Estado para que se produzca un acuerdo marco y especialmente en reducir la variabilidad de interpretación por parte de los fiscales de la petición de falta o delito ante hechos semejantes.
En aquellas Comunidades Autónomas donde existen convenios se ha notado una especial sensibilidad y complicidad en acelerar y en dictar sentencias ejemplares ante una agresión.
-En 2013 se produjo un descenso del número de agresiones a médicos ¿cuáles han sido los factores más determinantes para lograr este descenso?
Una mayor sensibilidad ante el problema y mayor firmeza por parte de los agredidos a la hora de comunicar la agresión, de las juntas directivas de los colegios y de sus servicios jurídicos a la hora de plantear las denuncias.
El considerar al medico como autoridad y por tanto considerar la agresión como delito también ha contribuido de forma determinante.
El propio médico mejorando sus competencias ante situaciones de agresividad y su alta cualificacion y responsabilidad en estos momentos especialmente duros, donde la crisis podría haber aumentado el número de agresiones, también ha contribuido en su disminución.
-Cuándo un profesional sufre una agresión ¿Cuál es el protocolo a seguir? ¿hay diferencia entre el protocolo a seguir dependiendo de si se produce la agresión en el ámbito de la sanidad pública o en la privada?
Ya hace años, en el origen del Observatorio de Agresiones, se puso en marcha un protocolo de actuación ante una agresión que tienen todos los Colegios a disposición de sus colegiados.
Este protocolo no mira el ámbito donde se produce la agresión, sino que valora al medico agredido, analiza el hecho y promueve especialmente la apertura de diligencia para una posterior denuncia.
-Hay una clara desprotección o desigualdad del médico que ejerce la medicina privada respecto al de la pública ¿Qué medidas está tomando el Observatorio para trabajar en la equiparación de ambos ámbitos?
Sabemos que en la reforma del Código Penal será complicado incluir el hecho de que el médico sea considerado autoridad pública en el ejercicio privado, pero si podemos y debemos exigir que la agresión a un médico en el ejercicio de su profesión sea un agravante, con lo cual podríamos equiparar la pena.
-Se ha puesto en marcha el I Curso de Prevención y Abordaje de las Agresiones ¿Qué opina de esta iniciativa? ¿la prevención es la mejor herramienta para evitar las agresiones?
La OMC ha analizado detenidamente todos los factores que influyen en una agresión. Podemos resumir que una agresión se produce por factores relacionados con el paciente, por factores relacionados con la organización de los servicios y por último por factores dependiente del propio médico (formación, habilidades de comunicación, estado de salud, etc) Es sobre estos factores donde estamos trabajando y ofreciendo desde nuestra Fundación de Protección Social las competencias necesarias, especialmente para los medicos que han sufrido agresiones y los más jóvenes, para adquirir habilidades para evitar las agresiones
-Hay muchas formas de agresión. Como médico, ¿alguna vez se ha sentido agredido?
No he sufrido agresión física alguna, pero si he tenido algún encuentro especialmente agresivo con amenazas incluidas que afortunadamente se quedo ahí. Quiero destacar, porque lo he podido comprobar en mi práctica diaria, lo importante que es adquirir habilidades en comunicación ante el paciente difícil o con agresividad, por lo que recomiendo la realización de esta actividad que ha puesto en marcha la Fundación de Protección Social a todos los medicos en su periodo de formación.