Aumenta el número de adolescentes que padecen reflujo gastroesofágico
El desorden en los hábitos alimentarios rompen con frecuencia una dieta equilibrada y ocasionan un incremento de los trastornos funcionales digestivos
Madrid, 7 marzo 2009 (medicosypacientes.com)
El ritmo de vida actual y el estrés hace que la mayoría de las personas cambien sus hábitos alimentarios. Las desordenadas pautas alimentarias rompen con frecuencia una dieta equilibrada y ocasionan un incremento de los trastornos funcionales digestivos.
Según el profesor Manuel Díaz-Rubio, Jefe de Servicio de Aparato Digestivo del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, “el estrés y la ansiedad son acompañantes diarios de todos nosotros. Sin duda, los trastornos funcionales digestivos son muy frecuentes en las consultas tanto de Atención Primaria como Especializada. La dispepsia y el síndrome de intestino irritable son dos de las patologías que se diagnostican con más frecuencia”.
Asimismo, el profesor Díaz-Rubio subraya que se están incrementando el número de niños y adolescentes con problemas gastrointestinales. “Debemos de permanecer en alerta ya que cada vez se dan más casos de enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) en los adolescentes. Las causas no son bien conocidas y deben ser investigadas en profundidad.”
“El reflujo en el niño es una situación frecuente que requiere el tratamiento adecuado, bien quirúrgico o farmacológico. Por supuesto, que el farmacológico debe ser con un inhibidor de la bomba de protones (IBP), y la futura indicación de esomeprazol en el niño será muy bien recibida por los pediatras. Además, esomeprazol es el único IBP que ha desarrollado una presentación en sobres específica para niños”, explica el profesor.
Para el profesor Díaz-Rubio, “la experiencia que vamos acumulando se plasma en nuevas indicaciones, manejo diferente de los fármacos, combinaciones terapéuticas, etc. Todo ello como consecuencia de los cambios que se van produciendo y por la experiencia de quien maneja estas alternativas y la evidencia científica”.
Con relación a las enfermedades esofágicas y en concreto a la enfermedad por reflujo (ERGE), los cambios en el estilo de vida o la medicación que tome el paciente aliviarán los síntomas y ayudarán a prevenir lesiones en el esófago. En cuanto se abandona el tratamiento, los síntomas aparecen. Por eso el tratamiento debe seguirse durante mucho tiempo; a veces incluso durante toda la vida.