Durante el coloquio que mantuvieron los representantes de las organizaciones que integran el Consejo Social de la OMC se abordaron además otros temas tales como el papel de la Atención Primaria en el sistema; la responsabilidad ciudadana ante el mal uso de los servicios; si existe discriminación o se ha producido un deterioro en la atención sanitaria y sobre la privatización de la sanidad pública
Madrid, 10 de abril 2014 (medicosypacientes.com)
Durante el coloquio que mantuvieron los representantes de las organizaciones que integran el Consejo Social de la OMC: el Dr. Juan José Rodríguez Sendín, presidente de la Organización Médica Colegial; Begoña Barragán, miembro de la Junta Directiva del FEP; José María Sánchez Monge, vicepresidente del CERMI y presidente de FEAFES; José Luis Meler y de Ugarte, presidente de CEOMA; y Miguel García Pérez, vicepresidente del FUCI. se puso de manifiesto, además, la importancia de la Atención Primaria en el cuidado del paciente, como así lo reconocieron los intervinientes, pese a que no se le da la importancia que representa. Prueba de ello, como se indicó, es que sólo se destina a la misma el 14 por ciento del prespuesto global de sanidad. Es por ello, como destacó Meler, «donde el ciudadano percibe en mayor medida los recortes».
El doctor Rodríguez Sendín subrayó el papel que representa en el conjunto del sistema, «la A.P. nos permite, incluso, que nuestro sistema sanitario sea de los mejores del mundo. De tal forma que si alteramos su estructura estaremos poniendo en riesgo las bases del SNS».
Barragán lamentó, por su parte, que no se invierta lo suficiente en este nivel asistencial, de ahí que pidiera un mayor esfuerzo dado el papel que representa en los cuidados que se les presta a los pacientes». Por otra parte, y ante el dato que se puso sobre la mesa de que el 50 por ciento de pacientes que van al hospital no pasan por los centros de salud, reconoció que «es verdad que el paciente no siempre sigue el cauce asistencial establecido», atribuyéndolo a la falta de formación que se le brinda para que sepa que tiene qué hacer, cuándo y cómo. «No se invierte en ello, hay que hacer un mayor esfuerzo».
Pacientes que hacen mal uso del sistema
Lo que Barragan no considera formativo, precisamente, es «cualquier medida que equivalga a castigo, multa, etc.», «Si tenemos un fraude fiscal de 67.000 millones de euros, y en 2013 hemos tenido un gasto sanitario en torno a los 55.000 millones, hay que pensarse si hay que castigar a los pacientes».
El doctor Rodríguez Sendín aprovechó para aclarar sus planteamientos pronunciados en el Forum Nueva Economía a raíz de una pregunta formulada en el coloquio sobre un posible copago indiscriminado.
«Lo que manifesté -añadió al respecto- es que ningún español pueda quedarse sin tratamiento cuando lo necesite por falta de recursos», subrayando, que «nunca pondría un copago por ir al médico ni por recibir asistencia aunque ésta se solicite por miedo». «Sin embargo deberíamos pensar establecer medidas para controlar el mal uso de los servicios sanitarios; cuando no se anula la plaza de la lista de espera que no se va a utilizar, es decir cuando ni se acude ni se anula la consulta, impidiendo que otros pacientes ocupen su lugar. También cuando se acude a urgencias consciente y reiteradamente en vez de acudir al centro de salud. En todo caso siempre serían medidas evitables que no impedirían nunca recibir la atención necesaria.
El presidente de la OMC solicitó, al respecto, la colaboración de las organizaciones de pacientes, de usuarios, de mayores, y de otros estamentos para reivindicar un buen uso del SNS y para ofrecer soluciones prácticas porque, en definitiva, «los más perjudicados son los pacientes más necesitados, al igual que si se establece un copago».
Sobre este tema Sánchez Monge apuntó que «puede que haya alguna persona que no utilice adecuadamente el sistema, pero hay necesidad de atención y para aquellos que están en peor situación lo mejor es que se mejore la situación para que todos tengan la mejor atención en función de la necesidad de cada persona». Desde su punto de vista, las medidas restrictivas «habría que aplicarlas a casos particulares».
Méler opinó de manera similar «habría que estudiar cada caso en concreto, en relación al copago». Mientras, García Pérez se mostró de acuerdo con el déficit de información en materia sanitaria por parte de los ciudadanos, pero consideró que «éstos han de ser conscientes de las repercusiones del uso indebido de la Sanidad, planteando si este mal uso debería ser gratis».
Los participantes también abordaron otras cuestiones como la privatización de la sanidad pública, que rechazaron unánimemente, o el problema de la falta de equidad entre CC.AA., recordándose, al respecto, que la solidaridad «es una de las características que definen al SNS, representada a través de la equidad en base a la cual se establecen los principios básicos del SNS: cobertura universal, financiación pública, control público y social y transparencia en el uso adecuado de los recursos y su distribución».
