El Colegio de Médicos de Cantabria acogió ayer la celebración del centenario de la Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (OMC), en un acto donde se puso en valor los 100 años de solidaridad de los médicos cántabros hacia sus compañeros y familias en situación de especial necesidad y que han recibido las ayudas de la Fundación con el trabajo de la corporación médica
Médicos colegiados, beneficiarios, personal responsable de la FPSOMC en el Colegio de Médicos de Cantabria recorrieron, en el encuentro, la historia de la Fundación y el papel del Colegio de Médicos a lo largo de estos 100 años.
El acto contó con la participación del presidente de la OMC y FPSOMC, Dr. Juan José Rodríguez Sendín; el presidente del Colegio de Médicos de Cantabria, Dr. Tomás Cobo Castro; el vocal de médicos jubilados Dr. Fernando de la Torre; la responsable de las prestaciones de la Fundación en la corporación médica, Ana Toca Santamatilde; el Dr. Marcelo Mateo Amezarri, médico beneficiario de la Fundación y actual Alcalde de Villafufre. Al mismo se sumó la consejera de Sanidad, María Luisa del Real, médica también que clausuró el acto.
También acompañaron en el encuentro el vicepresidente segundo de la OMC y FPSOMC, el Dr. Javier Font; el secretario general, el Dr. Juan Manuel Garrote; su tesorero, el Dr. José María Rodríguez Vicente; y los Representantes Nacionales de Médicos en Formación y Empleo Precario, Dra. Mónica Terán y Dr. Fernando Rivas, respectivamente.
El Dr. De la Torre inició el acto agradeciendo el celebrar el aniversario de un importante hecho que ocurrió hace un siglo. “Hace 100 años los doctores Carlos María Cortezo y José Pando y Valle crearon el Colegio de Huérfanos de Médicos para atender de manera solidaria las necesidades no solo de los huérfanos de médicos sino de todos los compañeros en situación de necesidad y que careciesen de recursos económicos”, señaló.
Desde entonces la Fundación ha ampliado mucho su abanico de prestaciones, aunque el espíritu con el que nació que es la solidaridad de los médicos se mantiene, según explicó el Dr. de la Torre. Resaltó que la Fundación atiende a una gran cantidad de familias que dependen de los médicos y a las que se destina más de 14 millones de euros para un total de 3.000 prestaciones.
El Dr. Juan José Rodríguez Sendín destacó el éxito de Fundación en cuanto al método y el esfuerzo de los médicos para socorrer desde la solidaridad a los que lo necesitan. “Un método –dijo- que en 100 años no ha tenido ningún agujero negro, ni mancha en su gestión”.
En esta tarea agradeció a los Colegios de Médicos su labor y manifestó que “sin toda la estructura colegial y provincial, en este caso, sin una estructura como la del Colegio de Médicos de Cantabria, sería difícil mantener la Fundación”.
Y también tuvo palabras de agradecimiento para los médicos cántabros por “mantener estos altos niveles de solidaridad que hacen posible cubrir las necesidades de las personas en situaciones de especial vulnerabilidad” y animó a seguir haciéndolo “para continuar con el sentimiento de solidaridad nuestro para hacer un mundo más justo”.
El Dr. Cobo puso en valor el espíritu solidario de la Fundación que, a su juicio, enlaza con el núcleo vocacional de los médicos. “La vocación de los médicos es ayudar al que lo necesita y suponen un ejemplo” y destacó la misión de la Fundación, desde su nacimiento en 1917, de aunar la solidaridad de todos médicos españoles hacia sus compañeros en situaciones de especial necesidad.
Huérfanos de médicos, médicos discapacitados, menores que no pueden estudiar sin recursos pasan son ejemplos a los que el Colegio de Médicos ayuda, según relató Ana Toca, responsable de gestionar las prestaciones de la Fundación desde la corporación médica. “Este año hemos atendido a 26 beneficiarios desde el Colegio de Médicos destinando más de 180.000 euros al total de prestación” y recordó la importancia de aunar el aspecto humano a la hora de atender a los beneficiarios. “Son viudos o viudas, y huérfanos que pasan por situaciones de mucho dolor y nuestro trabajo es ayudar a hacer su situación menos complicada”.
El Dr. Marcelo Mateo expresó el agradecimiento a la Fundación y el Colegio de Médicos “por todo lo que hicieron por mí y mi hermana cuando nos quedamos huérfanos con 8 y 10 años, respectivamente, para que pudiéramos seguir estudiando” y resaltó la aportación solidaria que todos los médicos hacen a la Fundación. “Sin esa ayuda hoy no sería lo que soy”.
Finalmente, la Consejera de Sanidad, María Luisa Real, que también es médico, puso en valor la capacidad de la Fundación por adaptarse a la sociedad y a las necesidades sociales de las personas desde su inicio como patronato hasta ahora. “Desde la Fundación se vehiculizan la solidaridad de los médicos españoles hacia sus compañeros que están en situación de especial necesidad”.
