En España, los niveles de resistencias bacterianas son especialmente preocupantes. Las cifras superan la media europea del 15%, situándose en torno a un 18%, según se puso de manifiesto en el marco del XXIII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología clínica (SEIMC), y que podrían superar como causa de muerte al cáncer en 2050
Estos y otros datos fueron expuestos durante la Mesa conjunta AEMPS-SEIMC “Planes de lucha contra las resistencias bacterianas en Europa”, donde la hasta ahora eurodiputada socialista Soledad Cabezón explicó que este riesgo no solo supone un problema para la salud, sino también un gasto de 1.500 millones de euros al año en la Unión Europea (UE). Además, advirtió de que, si la situación continúa de esta manera, las resistencias bacterianas podrían superar al cáncer como causa de muerte en 2050.
En este sentido, recientemente la UE sacó adelante una estrategia, bajo el título Plan de Acción 2017-2020, ‘One-Health’, que aún está pendiente de implementar. Por ello, es clave, tal y como afirmó Soledad Cabezón, que los planes nacionales cuenten indicadores vinculantes y estén financiados. Asimismo, recordó que, a mediados del mes de junio, el Consejo Europeo presentará las conclusiones de un documento para delinear las próximas medidas, que plantean «más investigación para nuevas vacunas», «desarrollo de equipos nacionales para seguir los planes de acción» y «abre la puerta a posibles regulaciones sobre el uso, prescripción y venta de antibióticos», indicó.
Por su parte, el coordinador del Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN) 2019-2021, Antonio López, afirmó que, en el nuevo plan aprobado en marzo por el pleno del Consejo Interterritorial de Sanidad, se advierte que es necesario implementar los Programas para la Optimización del Uso de Antibióticos (PROA), así como promover Programas de Prevención de las Infecciones Relacionadas con la Asistencia Sanitaria (IRAS) en todas las CCAA.