Los ministros de Sanidad europeos presentes en la Conferencia Ministerial Europea de la OMS sobre Nutrición y Enfermedades No Transmisibles en el contexto de la Salud 2020, celebrada en Austria, firmaron el pasado viernes la «Declaración de Viena», comprometiendo a los países de la Región Europea para hacer frente a la obesidad y las enfermedades no transmisibles relacionadas con la dieta
Viena, 8 de julio 2013 (medicosypacientes.com)
Los ministros de Sanidad europeos presentes en la Conferencia Ministerial Europea de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre Nutrición y Enfermedades No Transmisibles en el contexto de la Salud 2020, que se ha celebrado en Viena (Austria) firmaron el pasado viernes la «Declaración de Viena», comprometiendo a los países de la Región Europea para hacer frente a las causas fundamentales de la obesidad y las enfermedades no transmisibles relacionadas con la dieta y capacitar a los ciudadanos para tomar decisiones saludables.
En la Declaración firmada por los ministros reconocen que una dieta saludable puede contribuir a la consecución de los objetivos globales de las enfermedades no transmisibles adoptadas por la 66 ª Asamblea Mundial de la Salud, incluyendo el logro de una reducción relativa del 25% en la mortalidad prematura de las enfermedades no transmisibles en 2025.
«Acciones comunes orientadas a apoyar la mejora de la nutrición nos ayudará en nuestros esfuerzos para alcanzar este objetivo mundial voluntario. Reconocemos la importancia de la acción multisectorial y la salud capacidad de los sistemas de los métodos, la cobertura universal de la salud y de la ciencia basada en la prevención y tratamiento de las enfermedades no transmisibles dentro de las estrategias nacionales integrales e integradas», tal como consta en la Declaración de Viena.
A juicio de la directora regional de la OMS para Europa, Zsuzsanna Jakab, poner en práctica esta declaración «significa que Europa se embarca en una nueva ola de innovación de las políticas para reducir la obesidad y promover la salud».
En concreto, la declaración compartida de las naciones recoge la necesidad de «reducir la presión en los niños a consumir alimentos altos en grasa, azúcar y sal; y asegurarse de que la industria alimentaria no es una parte del problema y realmente contribuye a su solución».
Además,consideran adecuado realizar seguimiento de las cuestiones claves a través de diferentes grupos de la sociedad y fomentar la elección de alimentos saludables a través de medios como las innovaciones en materia de etiquetado.
Asimismo, se expresa el reconocimiento de que la comercialización de productos alimenticios para los niños debe ser un elemento clave y que la epidemia de obesidad está comenzando incluso antes en la vida lo que se pensaba.
Se subraya, por otra parte, que la nutrición de la madre es muy importante, así como un enfoque en la lactancia materna y el medio ambiente los alimentos para lactantes y niños pequeños.
Con estas medidas en la agenda de todos, en la Declaración figura el compromiso de intensificar esfuerzos políticos y estratégicos en el contexto de la Salud 2020, teniéndose en cuenta la adaptación a las opciones adecuadas a los diferentes contextos nacionales, y el mantenimiento de un equilibrio adecuado entre el aumento de la conciencia pública y la adopción de decisiones saludables.
Se adjunta Texto íntegro «Declaración Viena OMS-Región Europa 2013»
