El presidente de la AMM, el Dr. Ketan Desai ha emitido una petición urgente a las Naciones Unidas y todos sus miembros para apoyar un alto el fuego de urgencia que permita la atención médica que debe darse a las miles de personas atrapadas en la ciudad de Alepo
«Lo que estamos viendo hoy es una crisis de la civilización que lleva a un número de muertos catastrófica, millones de personas que están siendo expulsados de sus casas y miles de personas en estado de sitio». El Dr. Desai dijo que era esencial que todo el personal médico y las instalaciones sean protegidos y respetados para que se pueda asistir a la población.
Es por ello que la AMM ha hecho un llamamiento al Consejo de Seguridad de la ONU para poner la acción humanitaria antes de objetivos políticos. En concreto, los habitantes de Alepo tienen necesidad de atención médica inmediata y de suministros médicos. La AMM considera un deber moral y ético dar respuesta a la situación.
El presidente de la Asociación Médica Mundial insistió, por otra parte, en la necesidad de una investigación inmediata e imparcial sobre los ataques a la ciudad y en las acciones que deben adoptarse contra los responsables.
El sistema de salud en Siria ha quedado devastado tras cinco años de conflicto. Desde el comienzo de la guerra en Siria en 2011, cerca de 270 centros sanitarios han sido atacados y 760 trabajadores de la salud han muerto.
La atención médica cada vez es más difícil debido a la falta de suministros y de personal médico cualificado, además de por los ataques perpetrados contra las estructuras de salud.
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