La Federación Española de Medicina del Deporte (FEMEDE) quiere poner en conocimiento de toda la sociedad española el riesgo que puede suponer la desaparición de la especialidad de Medicina del Deporte y las consecuencias que ello tendría para el deporte español, de competición, de progresión, y el destinado a la mejora de la salud. Según dicha Federación, la decisión de las Administraciones sanitarias se adoptará el próximo mes de septiembre
Madrid, 10 de marzo 2015 (medicosypacientes.com/FEMEDE)
La Federación Española de Medicina del Deporte (FEMEDE) quiere poner en conocimiento de toda la sociedad española el riesgo que puede suponer la desaparición de la especialidad de Medicina del Deporte y las consecuencias que ello tendría para el deporte español, de competición, de progresión, y el destinado a la mejora de la salud.
De estos hechos, FEMEDE destaca una serie de ellos. El primero fue la decisión de que éste año sea el último en que se oferta plaza de formación de especialistas.
El segundo es que la decisión de mantenimiento de la formación de la especialidad se tomará en una reunión del Ministerio de Sanidad y de las Comunidades Autónomas en septiembre. Las perspectivas son poco esperanzadoras.
La Especialidad de «Medicina de la Educación Física y el Deporte», su nombre exacto, ha demostrado su necesidad de forma incuestionable. No solamente para prestar una ayuda insustituible a los deportistas de alto nivel, sino también para cubrir muchas otras funciones, según el escrito de esta Federación.
Implantación ineludible de un programa obligatorio de reconocimientos médico-deportivos. Estos reconocimientos son imprescindibles para reducir el goteo constante de muertes súbitas de deportistas en terrenos de juego y que sólo provocan alarma cuando suceden.
Tratamiento de lesiones específicas de deportes, especialmente las llamadas lesiones de partes blandas que se producen por sobrecarga y en las que el Médico del Deporte es un verdadero experto y está muy cualificado para su prevención y tratamiento.
En el deporte de rendimiento, la figura del médico es insustituible, tanto en el control del entrenamiento, como en los cuidados y tratamientos generales del deportista, así como en su acompañamiento durante entrenamientos y competiciones. No hace falta recordar que España es una potencia deportiva de nivel mundial y la participación del médico es este desarrollo es incuestionable.
El especialista en Medicina del deporte es el único que conoce y se preocupa por las consecuencias del dopaje que tan graves consecuencias puede tener para la carrera del deportista. Su desaparición provocaría un aumento significativo de los casos de dopaje accidentales en este pais. La función de nuestros especialistas en la prevención del dopaje es primordial.
La utilización del ejercicio para preservar la salud y para tratar una gran cantidad de enfermedades crónicas (obesidad, hipertensión arterial, cardiopatías, diabetes, enfermedades del aparato locomotor, diversos tipos de cáncer, depresión, etc.), es un hecho que nadie discute y la prescripción de este ejercicio debe ser realizada por el médico. El especialista en Medicina del Deporte es el más cualificado para realizar este trabajo que afecta a millones de personas.
La desaparición de la formación de la especialidad de Medicina de la Educación Física y el Deporte supondría, por tanto, un gran retroceso en la asistencia médica de calidad de los deportistas de todos los niveles que se verían privados del mejor profesional para su cuidado.
La petición que ha efectuado el colectivo de la Medicina del Deporte a través de la sociedad científica y profesional que los agrupa, la Federación Española de Medicina del Deporte, ha sido que se mantenga la formación de esta especialidad, adaptándola al sistema de formación especializada en hospital, como el resto de especialidades, de acuerdo con las necesidades actuales de especialistas que, en ningún caso, representan un coste económico significativo para el sistema, según concluye FEMEDE.
