El pasado mes de mayo, la Comisión Europea e Italia, como presidenta del G20, copatrocinaron la Cumbre Mundial sobre la Salud en Roma en la que los líderes del G20 compartieron las lecciones aprendidas de la pandemia y se comprometieron con una serie de acciones para acelerar el fin de la crisis de COVID-19 en todas partes y prepararse mejor para futuras pandemias.
El Boletín “Europa al día” elaborado por el Departamento de Internacional del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) recoge la información más relevante de este acontecimiento en la que se establecieron algunos principios comunes que se reflejaron también en un texto consensuado.
En esta cumbre se adoptó la ‘Declaración de Roma’, en la que alcanzan un compromiso con principios comunes para superar COVID-19 y prevenir y prepararse para futuras pandemias. En ella, reafirmaron que la pandemia sigue siendo una crisis sanitaria y socioeconómica mundial sin precedentes, con efectos desproporcionados en los más vulnerables (mujeres, niñas y niños), así como en trabajadores de primera línea y mayores. Hasta que los países no sean capaces de controlar la enfermedad, y se dé una vacunación a gran escala (mundial, segura, eficaz y equitativa), así como otras medidas de salud pública, no será posible acabar con esta crisis.
La declaración establece los siguientes principios comunes, que reafirman su compromiso con la solidaridad global, la equidad y la cooperación multilateral:
- Apoyar y mejorar la arquitectura sanitaria multilateral existente
- Trabajar para apoyar mejor la implementación, el monitoreo y el cumplimiento completos del RSI, y una implementación mejorada del enfoque multisectorial de Una sola salud, basado en evidencias
- Fomentar enfoques de políticas de toda la sociedad y de salud en todos, con elementos nacionales y comunitarios que se refuercen mutuamente, y promover la responsabilidad en los niveles más altos de gobierno
- Promover el sistema de comercio multilateral, destacando el papel central de la OMC y la importancia de cadenas de suministro globales abiertas, resilientes, diversificadas, seguras, eficientes y confiables en toda la cadena de valor relacionada con las emergencias sanitarias
- Permitir el acceso global equitativo, asequible, oportuno a herramientas de prevención, detección y respuesta de alta calidad, seguras y efectivas
- Apoyar a los países de ingresos bajos y medianos para crear experiencia y desarrollar capacidades de fabricación de herramientas locales y regionales
- Aprovechar las sinergias y aprovechar la experiencia de las organizaciones y plataformas pertinentes para facilitar el intercambio de datos, el desarrollo de capacidades, los acuerdos de licencia y las transferencias voluntarias de tecnología y conocimientos técnicos en términos mutuamente acordados
- Mejorar el apoyo a las estructuras de preparación y prevención existentes para la inmunización equitativa contra enfermedades prevenibles por vacunación y los programas de vigilancia y salud para estas y otras enfermedades
- Invertir en la fuerza laboral mundial de la salud y la atención
- Invertir en recursos, capacitación y personal adecuados para los laboratorios de diagnóstico de salud pública y animal
- Invertir en seguir desarrollando, mejorando y mejorando los sistemas interoperables de información de alerta temprana, vigilancia y activación de acuerdo con el enfoque de Una sola salud
- Invertir de manera predecible, efectiva y adecuada, en línea con las capacidades nacionales, en la cooperación nacional, internacional y multilateral en investigación, desarrollo e innovación
- Coordinar las medidas farmacéuticas y no farmacéuticas y la respuesta a emergencias, en el contexto de una recuperación sostenible y equitativa
- Aumentar la eficacia de las medidas de preparación y respuesta apoyando y promoviendo un diálogo significativo e inclusivo
- Abordar la necesidad de mecanismos mejorados, simplificados, sostenibles y predecibles para financiar la preparación, la prevención, la detección y la respuesta ante una pandemia a largo plazo
- Buscar asegurar la efectividad de los mecanismos de financiamiento
Por otra parte, se acogió la designación de 2021 por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el Año de los trabajadores de la salud y el cuidado. Asimismo, se resaltó que las inversiones sostenidas en salud global, para lograr la cobertura universal de salud con la atención primaria como eje central, son amplias inversiones sociales y macroeconómicas en bienes públicos globales. Se reconoció que el impacto de la pandemia ha sido muy dañino en el progreso hacia el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
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