El Colegio de Médicos de Cantabria celebró su tradicional comida de Navidad con los médicos jubilados, en donde los colegiados Ángel Álvarez Sánchez; Arturo Díaz-Caneja Bustamante; Darío Fernández Gutiérrez; Luis Fernández Palazuelos; Ramiro Gutiérrez Ruiz; Bernardo Martín García; Manuel Oria Martínez-Conde; Luis Peña Alvear; Román Ramos Fernández; José Ramón Rodríguez Altónaga; Luis María de la Sierra Setién; María Teresa Sillero Martínez; José Ignacio Tobar Silva y José Ignacio de la Torriente Oria, recibirán las insignias de oro por los 50 años de colegiación
El presidente de la Fundación Caja Familiar de los Médicos de Cantabria, el doctor Marino Marina, entregó el Premio Extraordinario al alumno de la Facultad de Medicina que ha obtenido el mejor expediente académico, que en esta ocasión ha recaído en la alumna de Medicina, Andrea Estébanez Corrales.
Tanto el presidente del Colegio de Médicos como el Vocal de los Médicos Jubilados, Tomás Cobo y Fernando de la Torre, respectivamente, felicitaron a los médicos jubilados y les animaron a participar en las actividades que programa el Colegio de Médicos para que «vuestra experiencia sirva de ejemplo y acicate a los nuevas generaciones».
Cobo, al igual que Fernando de la Torre destacaron que el colectivo de médicos jubilados en Cantabria representa el 10% del total de los profesionales y reiteraron la necesidad de «una jubilación gradual, progresiva y voluntaria, tal y como existe en otras comunidades autónomas».
Por último, el presidente del Colegio de Médicos destacó el carácter vocacional, de dedicación y de servicio que siempre ha formado parte del ejercicio diario de la profesión médica.
