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Dra. Mónica Lalanda: «Las redes sociales son una especie de microscopio enorme a través del cual se puede observar la Medicina real”

Bajo el título “Como estar al día en Medicina: Periodismo y Redes Sociales”, la Dra. Mónica Lalanda, médico de Urgencias del Hospital General de Segovia, habló a los estudiantes de Medicina asistentes al IX Congreso de Educación Médica, que se celebra en Córdoba, sobre los beneficios de las redes sociales en la práctica médica, así como  de otros aspectos relacionados con el ámbito de la comunicación on-line

La Dra. Lalanda, que participó en esta mesa redonda, organizada por el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina, junto a otros expertos en comunicación como Emilio de Benito, redactor de El Pais; Javier Granda, periodista especializado en salud, y Lucía Barrera, directora de Gaceta Médica, abordó diferentes aspectos relativos a esta temática, desde la necesidad de tener presencia en redes sociales, hasta cómo los profesionales médicos pueden dotarse de herramientas útiles para el manejo de este tipo de comunicación on-line que se está imponiendo a pasos agigantados.
 
Como destacó la Dra. Lalanda, durante su intervención en la mesa moderada por la secretaria general del CEEM, Rocio Prieto,  “los estudiantes de Medicina aprenden sobre todo la teoría reglamentada de la Medicina”, mientras que lo que las redes sociales ofrecen, bajo su punto de vista, es “una especie de microscopio enorme a través del cual uno se puede asomar a la Medicina real”. 
 
Partiendo de la base de que los ciudadanos interactúan cada vez más a través de redes sociales, “preguntan, critican, se informan. Y es que, como remarcó, “la medicina ya no está sólo en las consultas, por tanto, el médico tiene también estar en las redes sociales y relacionarse on-line con sus pacientes”. 
 
En este sentido, recordó que el 57 por ciento de las personas mayores de 65 años recurren a internet para consultar sus síntomas, lo que significa que “la brecha de la edad digital ha desaparecido”. Es por tanto, que el médico tiene que estar preparado para atender a un paciente más informado.
 
Destacó, por otra parte, el interés de campañas de promoción de hábitos saludables y otras más reivindicativas como “Así es la vida”, contra la medicalización, llevada a cabo por el Colegio de Médicos de Bizkaia, y otras como “no sin evidencia”, frente a la medicina no basada en la evidencia, etc.
 
También advirtió  de los riesgos que conlleva no acudir a páginas con una cierta calidad informativa y que pueden confundir y ofrecer resultados que no se corresponden con la realidad. De ahí, la importancia, como destacó, que desde las consultas también se prescriban fuentes útiles y con contenidos de valor para el paciente que consulta internet.
 
Las organizaciones profesionales han de evitar “la mala medicina en redes sociales”
La Dra. Lalanda consideró, por otra parte, imprescindible que las organizaciones profesionales participen más en este tipo de cambio social al que asistimos y que vigilen los riesgos que este tipo de canales de información pueden suponer también para los pacientes. En definitiva, “tienen que estar muy pendientes de que no se lleve a cabo una mala medicina en redes sociales, y formar al profesional para estar en estos espacios”.
 
En este sentido, como recordó, la Organización Médica Colegial dio un paso muy importante con la publicación del “Manual del buen uso de Redes Sociales”, dirigido a médicos y estudiantes de Medicina, y que, como indicó, “ha tenido una gran acogida entre todos los profesionales atraídos por esta nueva forma de hacer Medicina”. “La guía es muy referenciada a la hora de resolver conflictos en el contexto médico, que se plantean en las redes sociales”. En ese sentido destacó que la OMC “se ha convertido en un referente en la elaboración de una publicación de este tipo”.
 
Como retos en este ámbito, la Dra. Lalanda apuntó la necesaria formación que requieren los profesionales en este tipo de cuestiones, “fundamentalmente, para frenar el miedo que muchas veces surge ante posibles errores en los mensajes a transmitir a través de estas vías de comunicación on-line”. La fórmula que propone, en este sentido, pasar por “no despegarse de la sensatez que nos caracteriza a los médicos en todo tipo de actos que llevamos a cabo”.
 
 
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