martes, abril 23, 2024

Portal informativo de la Organización Médica Colegial de España

InicioOMCColegios y consejos autonómicosDr. Gómez Sancho "la Ética y la Deontología son las mejores herramientas...

Dr. Gómez Sancho «la Ética y la Deontología son las mejores herramientas para salvar la seguridad del paciente y el mejor ejercicio profesional»

El Dr. Marcos Gómez Sancho, presidente de la Comisión Central de Deontología de la OMC, asegura que "la Ética y la Deontología son las mejores herramientas para salvar la seguridad del paciente y el mejor ejercicio profesional" con motivo de la convocatoria de la segunda edición del Curso de Iniciación a la Ética y la Deontología Médica de la Fundación para la Formación de la OMC

El experto en Ética aborda en una entrevista para Médicos y Pacientes los objetivos de este curso «que contiene unos principios que el médico puede aplicar en la optimización de las relaciones con sus pacientes, la calidad de la atención médica y las correctas relaciones de los médicos entre sí y con otros profesionales» – afirma.

 
Gómez Sancho pone en valor el Código Deontológico de la Organización Médica Colegial, «razón fundamental de ser de los Colegios de Médicos que garantiza a los pacientes que quien les atiende se rige por un código que le obliga a hacer las cosas bien».
 
En referencia al actual contexto de crisis «no sólo económica» pone de relieve que la Administración no ha llegado a comprender que «como en cualquier empresa, el capital humano es lo más importante» y subraya que «los médicos siempre antepondrán sus obligaciones deontológicas a cualquier tipo de presión o deficiencia por parte de la institución en la que trabajen».
 
Finalmente adelanta que la segunda edición de este curso incorpora más debates y una mayor interacción con los profesores, aporta conocimientos que «hoy en día deben de ser considerados imprescindibles».
 
¿Cuáles son los objetivos del curso?
 
La ética y la deontología se ocupan del buen quehacer médico. Por eso, hace falta un código donde se exprese claramente cómo se deben hacer las cosas bien en la actividad profesional. Esa es la razón fundamental de ser de los Colegios de Médicos y de por qué debe ser obligatoria la colegiación. El médico que no esté colegiado no está obligado a seguir este código de deontología; los ciudadanos no tienen, en esos casos, la garantía de que quien les atiende se rige por un código que le obliga a hacer las cosas bien (Código de Deontología Médica [CDM]).
 
La Ética y la Deontología son, con toda seguridad, las mejores herramientas para salvar tanto la seguridad del paciente como el mejor ejercicio profesional. Creemos que, en general, existe muy poco conocimiento de los principios de la Deontología Médica y nos consta que existe una importante demanda educativa en este campo por parte de los médicos españoles y con este Curso de Iniciación a la Ética y la Deontología Médica  pretendemos dar respuesta a esta demanda.
 
El año 2012 la Comisión Central de Deontología (CCD) elaboró un Manual de Ética y Deontología Médica con 21 capítulos (que se corresponden con los 21 capítulos del Código), precisamente para promover y facilitar a los médicos españoles su formación en esta materia y adquirir habilidades para la interpretación y aplicación del Código, muy especialmente aquellos artículos más controvertidos. Este Manual constituye el material docente del presente curso y ha sido ampliamente difundido por los distintos Colegios españoles, aunque creemos que éste es un aspecto que aún se puede mejorar.
 
Son muchos los médicos que por motivos diversos (familiares, laborales, de distancia, coste, etc.,) no pueden realizar cursos presenciales de estas materias y por ello se ha formulado el curso en línea, con lo que se hace más flexible y fácil la participación de los profesionales.
 
Tras el éxito de la primera edición ¿Qué cambios ha habido para esta nueva edición?
 
El contenido del material docente es el mismo de la edición anterior pero sí que hemos introducido algunos cambios en la metodología y organización dando respuesta así a las sugerencias que los alumnos de la edición anterior pusieron de manifiesto en la evaluación correspondiente al finalizar el curso. Más debates, mayor interacción con los profesores y realizar 2 exámenes a lo largo del curso en vez de sólo uno al final, una duración mas breve (3 meses), son algunas de ellas.
 
Como novedad también con respecto a la edición anterior, vamos a hacer un esfuerzo importante, para que puedan realizar el curso los alumnos del último o últimos cursos de las Facultades de Medicina. Creemos que es fundamental que los estudiantes se empapen en los principios de la Deontología desde épocas muy tempranas.
 
¿Qué más puede ofrecer un amplio conocimiento en este ámbito a un profesional médico?
 
La formación médica continuada (FMC) interesa al médico pero también a la sociedad que debe estimularla, ya que se beneficia directamente de la calidad de la asistencia de los profesionales. Los beneficios de una FMC activa y bien organizada han de manifestarse también en la conducta ética del médico, que cada vez con más frecuencia se enfrenta con problemas derivados del progreso científico-técnico de la medicina.
 
Los médicos han asumido como necesaria la FMC y hacen esfuerzos para llevarla a la práctica y no siempre suficientemente apoyados por las instituciones, pero esta asunción responsable se ha fijado casi exclusivamente en aspectos científicos y técnicos, relegando, con mucha frecuencia, los aspectos éticos y deontológicos de la profesión, que siempre han sido importantes, pero hoy día y por muy diversas razones deben ser considerados como imprescindibles. Hay que tener en cuenta, como valor añadido, que este curso está excelentemente acreditado por la Comisión Nacional de Formación Continuada con 8 Créditos.
 
¿Cómo puede aplicar un médico los conocimientos adquiridos en este curso?
 
En primer lugar, y sobre todo, en la optimización de las relaciones con sus pacientes, la calidad de la atención médica y las correctas relaciones de los médicos entre sí y con otros profesionales sanitarios. Pero más allá de esto, hay muchos otros asuntos que contiene nuestro Código (y que se estudian en el curso) que son cruciales para la actividad profesional de  médico. Tales son la objeción de conciencia, el secreto profesional, la atención al final de la vida, trasplantes de órganos, pruebas genéticas, dopaje deportivo, reproducción humana, tortura y vejación de las personas, publicidad médica, etc., y así hasta completar los 21 temas del curso y que son a cual más importante para la actividad diaria del médico.
 
¿La formación en ética y deontología es un deber de los Colegios de Médicos? ¿por qué?
 
Los Colegios de Médicos tienen encomendada por el Estado la autorregulación de la profesión. Es importante recordar que los médicos nos exigimos a nosotros mismos mucho más de lo que nos exigen las Leyes. La Deontología va mucho más lejos que el Derecho y nuestra capacidad y también nuestra obligación de autorregulación debe de ser sagrada.
 
Son muchos los frentes a atender, pero lo principal, lo prioritario es la elaboración y actualización de las normas deontológicas plasmadas en el CDM y la aplicación de las mismas a los colegiados. Sin duda las normas deontológicas y su adecuada aplicación debe estar entre las prioridades de los responsables de dirigir los Colegios profesionales de médicos. Todo esto se complementa, como es lógico, con el mayor esfuerzo posible por parte de los Colegios para divulgar y promocionar nuestro Código y promover intensamente su conocimiento, su estudio y, por supuesto, su aplicación.
 
Lo que es cierto es que las Comisiones de Deontología imponen un tremendo respeto entre los colegiados, incluso, más que el propio Colegio, y es algo que me parece bien, al igual que entiendan que el Código Deontológico es sagrado, se lo tienen que saber,  tenerlo siempre presente y actuar conforme a él.
 
Sin embargo, también es verdad que las Comisiones Deontológicas tenemos la responsabilidad de ser cercanas a los colegiados, por ello estamos ideando nuevas formas de acercamiento como puede ser, por ejemplo, la edición de una especie de manual con muchos casos prácticos para que el médico pueda ilustrarse en ese sentido. También sería bueno que desde cada Colegio provincial se organizaran actividades dirigidas a los colegiados para formarles, informarles y capacitarles en aspectos deontológicos imprescindibles.
 
En este sentido, se acaba de establecer una línea de extranet para facilitar la comunicación entre la Comisión Central de Deontología y las Comisiones de los Colegios provinciales y ello tendrá también un impacto en la facilitación de la docencia en materias deontológicas en los colegiados españoles.
 
¿La crisis actual está afectando a la aplicación de los principios deontológicos en la profesión?
 
Hay que tener presente que la crisis actual no es solamente económica, sino que va mucho más allá, afectando a los valores esenciales de la sociedad. Valga como ejemplo el hecho de que haya varios centenares de dirigentes políticos sometidos a la acción de la Justicia por corrupción (entre encarcelados, condenados, imputados, sospechosos, etc.), personas todas ellas que tendrían que dar un especial ejemplo a la sociedad que les eligió para resolver problemas y no para crearlos. Cuando comenzó la crisis, las autoridades dijeron repetidamente que habría importantes recortes, pero que no se tocaría ni la sanidad ni la educación. Anacrónicamente, la realidad es que prácticamente estos han sido los únicos sectores en los que se han aplicado recortes brutales.
 
Es fácil pensar que estos recortes provocados por la crisis podrían haber provocado algún deterioro de la relación asistencial con los pacientes. Ninguna plantilla está sobrada. Si se las restringe, necesariamente tiene que repercutir en la asistencia. Por lo general, la Administración se preocupa poco por los profesionales. No ha llegado a comprender que, como en cualquier empresa, el capital humano es lo más importante. Está el ejemplo de los médicos que estos años, y como consecuencia de la crisis, hemos sido vilmente jubilados (el adverbio es exacto), de malas formas y siguiendo exclusivamente rigurosos criterios económicos. Eso, antes o después, tendrá un impacto en la atención a los enfermos, pero nunca por culpa de los médicos, quienes saben bien que los pacientes son su razón de ser y, además, los primeros perjudicados. Los médicos siempre antepondrán sus obligaciones deontológicas a cualquier tipo de presión o deficiencia por parte de la institución en la que trabajan.
 
La Medicina no deja de ser un reflejo de la sociedad en la que está inmersa. En la sociedad actual parece ser que «los valores ya no valen» (aparente paradoja expresada ya por Nietzsche). Cualidades como la honradez, la sinceridad, la prudencia, el trabajo, la responsabilidad han caído en un absoluto descrédito, y son  sustituidos por otros valores de la postmodernidad, como el económico, la apariencia, la presencia física, la eficacia, la eficiencia, la competitividad… que, desde mi punto de vista, no ayudan en absoluto a las personas enfermas. Frente a esta crisis que pone en riesgo los valores tradicionales del buen hacer médico reitero que tanto desde la OMC como desde su Comisión de Deontología se están ofreciendo puntos de resistencia activa para intentar contrarrestarlos. Más info en www.ffomc.org
Relacionados

TE PUEDE INTERESAR

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Más populares