Concepción Valverde Ferrer, profesora de literatura y ganadora del Premio de Novela Albert Jovell que ha otorgado la Fundación de Protección Social de la Organización Médica Colegial por primera vez este año, agradece, en esta entrevista a “MédicosyPacientes”, haber recibido, con su primera novela, este reconocimiento literario vinculado a la profesión médica. Para ella la literatura es “expresión de la de la condición humana, algo con lo que el médico trabaja”
Concepción Valverde Ferrer, profesora de literatura ha sido ganadora, con la obra titulada «La Biblioteca Fajardo», del Premio de Novela Albert Jovell, que ha otorgado la Fundación de Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC) por primera vez este año.
La ganadora, natural de Granada y residente en Madrid, está licenciada en Filología Hispánica y Arte Dramático, y desarrolla su labor profesional como profesora de literatura en un Instituto de Enseñanza Secundaria, trabajo que complementa con su faceta como guionista.
Durante la entrevista, asegura que se siente orgullosa de ser la que inaugura este premio al que le desea “muchos años de trayectoria” y resalta que le “hará seguir escribiendo”.
Asimismo, como madre de una médico, destaca su vinculación con la profesión médica íntimamente ligada a su juicio, a la literatura, y pone en valor la labor de la Fundación en el ámbito de la protección social y como organismo que protege a los médicos “que los cuidadores de la salud se cuiden también y se protejan así mismos me parece necesario”, afirma.
Su novela un “homenaje a Cervantes, a Sevilla y al Siglo de Oro español” ha sido publicada por parte de la editorial Almuzara, como premio de esta categoría.
-¿Qué supone para usted haber sido la ganadora del Premio de Novela Albert Jovell pionero este año? ¿Le animará a seguir escribiendo?
Primero, la satisfacción de ganar un premio literario con una primera novela, ya que soy una escritora novel. Y en segundo lugar, que sea el premio “Albert Jovell” por lo que representa. Mi hija ha estudiado Medicina y está preparándose para el examen MIR, eso nos ha hecho conocer la profesión médica desde otro punto de vista. Lo he visto de cerca y por eso tengo tanta cercanía con la profesión médica y con la personalidad del Dr. Jovell que es un humanista, una persona tan cercana al otro. Son muchos premios los que recibo, se suma el literario a todos los personales.
Voy a seguir escribiendo y de hecho estoy en ello. Toda la vida como profesora de literatura explicando a los autores y escritores y ahora verme capaz de contar una historia es estupendo.
– Durante siete años el Certamen ha entregado sus premios a médicos o personal de las corporaciones médicas ¿Qué le parece la iniciativa de abrir la categoría de novela a todos los públicos?
Cuando se estrena un premio literario es una buena noticia para todos los autores y escritores. Es un placer y un honor ser la que inaugura este premio al que deseo muchos años de trayectoria.
-¿Cómo conoció la existencia del Certamen?
Desde que escribí la novela hace un par de años la he presentado a algunos premios y conocí este Certamen a través de un portal que frecuento llamado “escritores.org”.
-¿Qué le diría a otros profesionales para que se animen a participar en el siguiente Certamen?
Cuando escribí la novela, una profesora mía me propuso que la presentase a premios y yo pensé: ¡Qué difícil! Pero después de ganar este premio animo a todo el mundo a que se presente y lo intente, ya que es posible.
– Profesora de Literatura y guionista ¿qué supone para usted escribir?
Cuando yo escribo estoy inmersa en un mundo de disfrute siempre tengo ideas en mi cabeza y estoy pensando en mis personajes. Me ha gustado empezar a escribir porque me meto en un mundo mío personal, pero no cerrado sino dirigido a que luego otros lo conozcan.
– ¿Cómo ve el ámbito literario en la actualidad?
Desde mi punto de vista como profesora de literatura (porque hablar de escritora me parece aún tan nuevo y recién estrenado), me molesta que muchas veces prime el negocio, que las editoriales caigan en la tentación de publicar aquellos personajes mediáticos que van a dar unas ventas sustanciosas y que la gente que no está acostumbrada a leer, lea estos best seller y esta no literatura solo porque vengan de estrellas mediáticas de la televisión o del mundo del corazón.
–La Fundación de Protección Social nació para atender a los huérfanos de médicos que murieron a causa de la gripe española a principios del Siglo XX, hoy es un referente de solidaridad y protección social licenciada en Filología Hispánica ¿Cómo ve el papel de estas organizaciones en tantas situaciones de desprotección social que hay actualmente?
El papel de estas organizaciones me parece muy importante, sobre todo ahora que tengo una vinculación muy estrecha y familiar con la Medicina. Me parece una labor muy buena, que los cuidadores de la salud se cuiden también y se protejan así mismos me parece necesario.
-¿Cómo la literatura puede vincularse con la protección social?
La literatura se puede vincular con todo porque realmente la literatura, como dijeron unos grandes escritores del realismo, es “ese espejo que va recogiendo lo que somos”. La literatura es expresión de la vida y de la condición humana. Muchas personas despiertan su instinto solidario a través de unos versos, novelas u obras de teatro. No hay nada más solidario que la literatura porque Cervantes en su literatura se acerca siempre más al que sufre y al que está más necesitado de protección.
– El presidente de la corporación, el Dr. Juan José Rodríguez Sendín insiste frecuentemente en el uso de la palabra como herramienta de consenso y entendimiento entre los diferentes agentes de la profesión sanitaria. ¿De qué manera la literatura y “las palabras” pueden ayudar a la profesión médica?
Yo creo en el uso terapéutico de las palabras. Las palabras ayudan. La medicina es comunicación. Cuando el paciente llega y se sienta en la consulta delante del médico lo que está esperando son palabras. Lo que más espera son palabras optimistas y liberadoras, por ello hay que cuidarlas mucho. Como decía Pedro Salinas cuando se dice “no” hay que dejarlo salir de la boca con un sonar de “SI”, por ello cuando el médico tiene que decir cosas tan terribles a veces es importante que las sepa decir de una manera que aunque son “no” suenen a “sí”.
-¿Qué le inspiró para escribir la obra ganadora? ¿Por qué la Sevilla del siglo XVII?
Este libro es un compendio de todas las cosas que yo admiro, valoro y quiero. Es una época fascinante y que no conocemos bien porque va marcada siempre con ese sello de la leyenda negra y los españoles no solemos mirar a esa gran aventura, que es el descubrimiento y la colonización del Nuevo Mundo, con la satisfacción que deberíamos hacerlo. Es la historia de una ciudad que representa en ese momento al mundo, la ciudad de los prodigios y donde llegan todas las maravillas del mundo. Es la historia de una biblioteca y la llegada del Quijote a América y es un homenaje a Cervantes. Esta novela refleja el idealismo de sus novelas. Las novelas idealistas dicen lo que debiera ser la realidad, por ello están implícitos los dos ángulos, lo que debiera ser y lo que es por carencia. Es un homenaje a sus libros, al Siglo de Oro, a nuestra lengua y a nuestra historia.
-Como escritora de ficción, ¿se ha inspirado alguna vez en algún personaje relacionado con el ámbito médico? ¿Ve en esta rama alguna idea para futuras obras?
En esta novela se hace referencia a algunos tratados médicos, concretamente a un médico que en el Siglo XVI recorrió la selva de Guatemala y fue aprendiendo la Medicina india y vinculándola a la Medicina española. Esa fusión de las dos medicinas tuvo una gran repercusión. El médico es uno de los personajes más literarios que hay, y de hecho son muchas las novelas donde aparece el médico. Si la literatura explora la condición humana, el médico trabaja con ella. Son tantos los casos de médicos que son grandes escritores, por ello Medicina y literatura se ensamblan maravillosamente, y un médico es un personaje muy rico porque le ofrece al escritor tantas posibilidades para explorar al otro
Por supuesto es posible que en una futura novela esté de nuevo la figura del médico.
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